Quijadas: bloquean un camino para llegar a una escuela albergue

Verónica López y Luciano Urquiza aseguraron que ayer a la tarde hicieron la denuncia en la Comisaría de La Calera, la jurisdicción de la Policía que le corresponde al paraje San Antonio.

Cuando Luciano Urquiza y Verónica López fueron a buscar a sus hijos a la escuela albergue Francisco Rizzuto, ubicada en el paraje El Forzudo, Mendoza, a 30 kilómetros de su casa, se encontraron con la mala noticia de que el camino que realizaban habitualmente, a través del Parque Nacional Sierra de las Quijadas, estaba cerrado con un candado. Para buscarlos, lo antes posible, tuvieron que viajar desde el paraje San Antonio hasta Desaguadero y desde allí dirigirse hacia el departamento mendocino de Lavalle. “En total atravesamos seiscientos kilómetros de más para traerlos a casa. Ahora empezamos las vacaciones, pero si esto continúa así durante la época de clases, no podremos cruzar”, dijo López y agregó que no le gustaría repetir el episodio ya que sintió angustia al pensar que sus hijos estuvieron seis horas aislados.   
“Más allá de que fue una experiencia fea, hay una ley de caminos rurales que prohíbe el cierre de cualquier camino rural. Entonces esta familia hizo una presentación a la  Fiscalía Nº 1 para que lo reabran”, especificó la jefa del Programa Culturas Originarias, Mirta Mobellán, quien afirmó que lo que la administración de Parques Nacionales está haciendo es un avance sobre el territorio de San Luis y aseguró que la comunidad Huarpe hizo una presentación en la Corte Suprema porque por ley provincial las tierras les fueron restituidas. 
“Cuando hablamos con organismos de la Nación nos plantean que donde haya parques nacionales, en los que las comunidades originarias ya estén viviendo, pueden quedarse y percibir ganancias, pero con esto están demostrando que no es así”, dijo Mobellán y siguió: “A fines de junio le voltearon la vivienda de Juan Wenceslao Sosa, un vecino de los Urquiza, quien además fue intimado a quitar sus animales”.
“Cuando vinieron de Parques Nacionales, me dijeron que tenía que irme. No me mostraron ningún papel. Aún no hago la denuncia porque tuve que agarrar mis cosas e irme, ya que me tiraron la casa abajo. Además me intimaron a que me lleve lo antes posible mis animales, de los que ya saqué la mayor parte, pero todavía quedan algunos”, expresó Sosa, mientras miraba los planos, sin comprender por qué debe abandonar las tierras que ocuparon sus ancestros.
“Si esto no se denuncia, no va a pasar nada, ni con lo del camino clausurado, ni con las casas que han destruido”, concluyó la representante del Pueblo Nación Huarpe, Pascuala Guakinchay.