La defensa del detenido por un incendio llama a testigos

Quince días antes de que un incendio que comenzó en su campo se extendiera por otros y llegara hasta la ciudad de La Punta, donde amenazó dos barrios y destruyó la réplica de la Casa de Tucumán, Luis Rodolfo Cuello, ahora detenido como presunto autor de la quemazón, sacó sus vacas en camiones “porque me parece que quería hacer una quema para sembrar y, de esta manera, se ahorraba el dinero para rolar la tierra, porque después de la quema quedaría listo para sembrar esa semilla que había comprado”. Eso declaró ante la Policía el dueño de un campo vecino, Julio César Rodríguez, quien en cierta medida contribuyó, con ese testimonio, a que Cuello ahora esté imputado, en la causa por “Estrago doloso y daños a bienes del Estado que investiga el juez de instrucción Penal 1 de San Luis, Sebastián Cadelago Filippi.

Los policías que le tomaron la declaración, en el inicio de la investigación realizada para ubicar al responsable del incendio, no le preguntaron a Rodríguez si Cuello le había dicho que pensaba prender fuego o cómo le consta que tenía ese plan.

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