Diseñan una silla que facilita los movimientos a personas parapléjicas

Sus medidas son 60 centímetros de ancho, 80 de largo por otros 70 de alto. Los materiales que la forman son plástico reforzado con fibra de vidrio, lo que le brinda la mejor relación entre resistencia y peso, es decir que es liviana y fuerte. Además ese material le permite amortiguar todas las irregularidades del suelo. Las demás piezas son de aluminio fabricadas por hidro corte (agua a muy alta presión) lo que permite que se puedan fabricar a la medida de cada usuario. Así describe Matías Torres a “Junco”, la silla de ruedas compacta de bipedestación manual que creó junto a su compañero de estudio Rodrigo Nuñes Molas (formoseño). Este prototipo tiene la particularidad que les permite a las personas con paraplejia estar erguidos.

Ambos son diseñadores industriales que egresaron hace dos años de la Universidad Nacional de Córdoba y juntos presentaron este proyecto como trabajo de tesis. Al año siguiente se presentaron en un  concurso de la Municipalidad de Córdoba y lo ganaron. Y con ese antecedente se presentaron en la competencia más importante que tiene el país a nivel tecnología que es el concurso "Innovar" del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación donde también resultaron ganadores.

Ahora tienen por delante un nuevo desafío ya que participan del concurso nacional de innovación tecnológica llamado "Samsung Innova" donde compiten junto a otros 21 proyectos de todo el país. Ellos están en la categoría “Impacto social o ambiental” donde pueden obtener 200 mil pesos de premio en caso de ser elegidos. Pero además podrán acceder a otros 200 mil si consiguen el “Gran Innova” que la empresa japonesa le otorga a uno de los tres vencedores. Y en caso de conseguirlo, les permitiría lograr los permisos legales y el capital necesario para poder comercializarla.

El diseñador que vive en la localidad de San Martín explicó que “está pensada para personas que sufren de paraplejia, es decir, que no tienen movilidad de sus miembros inferiores o tienen  reducida la funcionalidad. Pensamos que esas personas podían acceder a una mejor calidad de vida al poder utilizar sus brazos y hacer fuerza sobre un sistema de palancas neumáticas”. 

Junto a su compañero de estudio investigaron qué ofrecía el mercado para este tipo de discapacidad y encontraron que había dispositivos de bipedestación, es decir, que les permitía ponerse de pie y así pensaron en combinar una silla de ruedas de uso diario para gente que sale a la calle todos los días, que tiene un trabajo, que además tenga una vida social activa y que ahora les diera la posibilidad de mantenerse erguidos por sus propios medios.

Según Torres, “el usuario utiliza una suerte de apoyabrazos que la silla tiene a ambos costados donde acciona las palancas neumáticas y reproduciendo la gestualidad que una persona normal realiza al incorporarse de una silla común -es decir hacer fuerza con sus brazos para levantarse-, ellos son ayudados por unos resortes a gas que son los mismos que se usan en las puertas de los baúles de los automóviles”.  

La bipedestación es un sistema que reporta beneficios tanto fisiológicos como psíquicos: “Por ejemplo aumenta la capacidad pulmonar, mejora la digestión, previene deformidades esqueléticas, reduce úlceras por presión y mejora la gama del movimiento en caderas, rodillas y tobillos; entre otras. Y en el aspecto psicológico mejora su autoestima al potenciar su capacidad funcional ya que puede dominar los niveles primarios de autonomía”, destacó Torres. Pero además dijo que le permite mayor libertad en su entorno doméstico, social y urbano, “hasta le permitiría a muchos de ellos poder insertarse laboralmente”.

La idea es de ambos y se llama "Junco" porque según contó Torres “lo tomamos de una poesía que dice 'soy como el junco que se dobla pero siempre sigue en pie'. Con Rodrigo creíamos que era una obra de Almafuerte pero al tiempo supimos que era una canción de un grupo español y se llama 'Resistiré'. Igual nos gustó porque es una metáfora de lo que puede hacer una persona con nuestra silla”.