"Cuando estén los resultados voy a hacer importantes declaraciones"
Poco después de las 10:30 el candidato a senador nacional, Adolfo Rodríguez Saá votó en la mesa 513 de la Escuela N° 267 Gobernador Mendoza de Potrero de los Funes. Llegó acompañado de su esposa, Gisela Vartalitis, que sufragaba en el mismo establecimiento. Antes de partir habló con la prensa y adelantó que a las 18 irá a la sede del PJ.
Adolfo Rodríguez Saá llegó a la Escuela N° 267 Gobernador Eriberto Mendoza este domingo alrededor de las 10:30. Una veintena de periodistas y camarógrafos lo esperaban en la puerta del colegio que está en Potrero de los Funes. También algunos vecinos aguardaron después de sufragar temprano por la mañana para saludarlo o pedirle una foto.
El candidato a senador nacional arribó acompañado de su esposa, Gisela Vartalitis, donde ambos votaron. Adolfo lo hizo en la mesa 513 y Gisela, en la 514.
Mientras esperaba que su esposa sufragara, Rodríguez Saá vio a don Rufino Atilio Pedernera. El hombre de 94 años, padre del fallecido periodista Andrés Atilio Pedernera, depositó su voto en la misma mesa que el actual senador. Después de aplaudirlo, Adolfo se acercó a saludarlo y felicitarlo por su ejemplo y compromiso cívico.
Rodríguez Saá tardó unos siete minutos en salir de la escuela para hablar con la prensa frente al sol. A cada paso, los vecinos lo detuvieron para desearle suerte, darle un beso o pedirle una foto. En todos los casos se detuvo.
“Veo que hay una gran afluencia de votantes. Aparentemente el número de votantes será superior al que hubo en las PASO. Esto es bueno porque son formas de fortalecer la democracia y la participación del pueblo”, dijo al iniciar la ronda de prensa.
“Cuando tengamos el resultado de las elecciones voy a hacer importantes declaraciones”, adelantó y contó que desde las 18 estará en la sede del PJ. Al mediodía tenía previsto almorzar con su hermano, el gobernador Alberto Rodríguez Saá, su esposa y algunos amigos.
Después de recordar los largos encuentros que tuvo cara a cara con los sanluiseños en todos los rincones de la provincia, a lo largo de los últimos sesenta días, confesó: “Siento que soy un mejor Adolfo del que era. Pude escuchar al pueblo y esto hace que uno reflexione”. Y amplió las sensaciones de la experiencia. “Fue espectacular. Escuché cosas muy positivas y dolores inimaginables. Hay muchas madres solas con sus hijos, con chicos enfermos. No sé por qué escuché tantas veces la palabra cáncer”, se preguntó.
También se refirió al caso de Santiago Maldonado, cuyo cuerpo fue encontrado en el río Chubut: “Es muy doloroso (lo que pasó) y merece que sea investigado por la Justicia”.
Antes de subir a su auto encontró a un compañero de la escuela, bromearon sobre cuál de los dos era mayor y se despidieron con un fuerte apretón de manos.
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