Dos perros puntanos ayudaron a esclarecer un crimen en Santiago del Estero

Coco y Gerardo encontraron pruebas que ayudaron a esclarecer el homicidio de un nene de 11 años en Quimilí, Santiado del Estero, ocurrido en junio de 2016. Ambos pertenecen a la División Canes de San Luis y viven en la ciudad de Villa Mercedes.

Gerardo, un ovejero alemán gris, y Coco, un labrador, viajaron el miércoles pasado por un llamado de la División Canes de Río Negro. “Hemos tenido el privilegio de contar con el apoyo de la División Canes de San Luis y lograr importantes resultados”, expresaron fuentes de la policía y de la Justicia santiagueña en referencia al trabajo de los perros que lograron ubicar un galpón en el que se secuestraron elementos claves para esclarecer el hecho.

La conexión se dio por la coincidencia de ambas divisiones que trabajaron en conjunto en el caso del aún desaparecido Lucas Bolotti. La Justicia designó a los pares de Río Negro para que tomen la posta del caso y las autoridades recordaron los buenos trabajos realizados por los animales puntanos y por eso fueron requeridos.

Los capacitaron durante dos días y encontraron las pruebas en ese caso que conmocionó a un pueblo. El pequeño Mario Salto, de 11 años, fue hallado en junio de 2016 en un descampado de la ciudad de Quimilí, luego de estar desaparecido varios días. Las hipótesis son muchas, pero la jueza se inclina por un “homicidio ritual”.