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Va a la escuela, vende turrones en la calle y se ganó un beca para estudiar en el exterior

Por redacción
| 27 de marzo de 2017
Leandro Bustos en unas de las calles donde vende turrones.

Leandro Bustos es un chico 17 años que como muchos otros de sus edad va a la escuela de su barrio, y como algunos menos, además de estudiar tiene que salir a trabajar.

 


La historia de  este joven conmueve a más de uno y es un claro ejemplo de que cuando se tiene un sueño y se trabaja duro, seguramente llegas a buen puerto.

 


Leandro vive en la ciudad de Córdoba y al salir de la escuela,  si le queda tiempo después de las tareas escolares, ayuda a su papá jubilado vendiendo productos de limpieza, y los fines de semana sale a vender turrones por las esquinas mas transitadas de la ciudad.

 


Pero como si fuera una escena de película,  la vida de Leandro tuvo un giro inesperado y acaba de modificarse.  Es  que este joven vendedor de turrones  se ganó una beca para estudiar un Bachillerato Internacional en la India, a fines de 2016 se entero que fue elegido para asistir a una de las escuelas secundarias  de Colegios del Mundo (UWC) en Mahindra College en Pune, India.

 


Para llegar a esta instancia, realizó tres exámenes luego de postularse. Finalmente, en agosto, fue invitado a un campamento en Mendoza con los otros preseleccionados. “Con esfuerzo se puede. Si yo lo pude lograr, cómo no van a poder otros chicos” cuenta Leandro.

 


Ese viaje a Mendoza fue la primera y única vez que Leandro salió de Córdoba: “Para mi eso ya era increíble. Ahí estuvimos tres días donde hicimos diferentes actividades y al final nos entrevistaron personalmente a cada uno. Querían saber qué pensamos de la vida o cómo resolvería problemas que afectan a la sociedad”, cuenta el jóvencito cordobés.

 


Pero esta historia no iba a estar exenta de dramatismo con ribetes de guión fílmico. La beca cubre gastos de educación, alojamiento y alimentación por los dos años que dura el curso, pero el adolescente tiene que costear los pasajes, el seguro médico, la visa y el pasaporte.

 


“Vendo 3 turrones por 10 pesos. La mitad de lo que junto se lo doy a mi papá para que pueda pagar las cuentas” explica Leandro quien se encuentra ante una encrucijada, puesto que para poder pagar lo que la beca no cubre deberá recibir algún tipo de ayuda económica.

 


 “Me gustaría poder ir y ayudar, y después con todo lo que aprenda poder volver y ponerlo en práctica en mi país” dice este jovencito, que deberá esperar unos días para conocer el final de este capítulo de su vida.

 


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