“El noventa por ciento de los que vivimos acá somos gente de trabajo. Los problemas lo ocasiona el resto: una minoría. Son pibes que tienen entre 13 y 25 años”, dijo un vecino del barrio 1º de Mayo que prefirió reservar su nombre. El hombre observaba detrás de la reja de su casa el megaoperativo que la Policía realizaba en la zona oeste de San Luis y del que El Diario fue testigo.
Unos 60 efectivos recorrieron las calles que están en la jurisdicción de la Comisaría 4º cuando empezó a caer la noche, a partir de las 20 de este jueves. El operativo comenzó en la esquina que une Junín y Europa, en el barrio San Martín: dos camiones con personal del COAR, Comisaría del Menor, Lucha Contra el Narcotráfico, Tránsito, la Caminera y la División de Respuesta Inmediata Motorizada (DRIM) coparon el vecindario.
“Estamos identificando personas y vehículos. Labramos infracciones cuando detectamos motos o autos que no están en regla. De acuerdo a las encuestas que surgen de las denuncias, estos son barrios en los que hay muchos delitos”, contó el oficial principal Alexis Isaguirre, alrededor de las 20:30. Casi una hora después, ya habían secuestrado siete motocicletas para averiguar su procedencia.
A pocos metros de la avenida Centenario, caminado por una calle de tierra con escasa iluminación, la policía encontró a un menor de edad con un arma blanca. Vestía pantalón de jogging y un buzo azul con capucha. Entre la ropa tenía el cuchillo.
“En algunos casos los vecinos están contentos porque se sienten más seguros. Este trabajo lo hacemos varias divisiones en conjunto. Después de recorrer toda la zona que está bajo jurisdicción de la Comisaría 4º, iremos a los barrios de la 6º y la 38ª”, detalló el comisario Sergio Chareum, jefe del DRIM.
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