Más allá de los números de la cantidad de muertos que crecen todos los días, la guerra en Siria deja imágenes que estremecen. Una de ellas se conoció tras el ataque ruso al pueblo de Al-Lataminah, en la provincia de Hama.
Mientras la cámara avanza, aparece un nene caminando entre los escombros, con algunas heridas y cubierto de polvo tras el brutal bombardeo que destruyó el poblado casi por completo. El pequeño de unos cuatro años llora desconsolado y pregunta por su mamá.
El hombre que filma le pregunta dónde están sus padres, pero el nene sigue llorando, caminando y buscándolos. Según el informe de la televisión árabe, toda su familia murió en el ataque. Al igual que cientos de habitantes del pueblo arrasado.
Agencias
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