Docentes particulares, un oficio que tampoco le escapa a la crisis

Nadie se salva de la crisis económica que atraviesa el país y los profesores particulares no son la excepción. El Diario de la República realizó un sondeo y comprobó que con respecto al año pasado el cupo de alumnos que atienden a esta altura del año es mucho menor con respecto a 2019. En algunos casos tienen hasta un 80 por ciento menos. Las materias que más se llevan son Matemática, Física, Lengua e Inglés.

Gabriela Nicoloni comentó que en su caso bajaron notablemente las consultas y son pocos los estudiantes que acceden a un profesor particular. Además, destacó que prepara alumnos pero no les cobra. "Son chicos que vinieron años anteriores y no pueden pagar. Uno se adapta a la situación e intenta ayudarlos. No todo es dinero, lo importante es que ellos aprendan y aprueben", dijo.

Nicoloni precisó que esta semana se definen cuántas son las materias o los cuatrimestres que deben rendir a fin de año y coincidió en que las más comunes son Matemática, Física e Inglés. Sobre su modalidad de trabajo indicó que no recibe a más de tres chicos por vez y que si van al mismo curso evalúa que tengan igual nivel de conocimientos. 

Expresó que la hora la cobra a 250 pesos y para fijar los contenidos necesitan como mínimo tres semanas. Asimismo, detalló que en muchos casos el teléfono celular es una distracción, pero aclaró que en su clase solo lo utilizan para buscar información. "Ellos están pendientes de los amigos, pero trato de que sea un vehículo para aprender", precisó.

Esta tendencia se repite en las clases de apoyo de Liz Muñoz, quien advirtió que la crisis golpea fuerte el bolsillo de los puntanos y que con respecto al año pasado tiene un 80 por ciento menos de estudiantes. "La situación está complicada para todos. Muchos esperan las últimas semanas para terminar de tomar la decisión y evaluar cuánto tienen que invertir", dijo y agregó que la asignatura por excelencia es Matemática. 

Aseguró que durante todo el año cobró 250 pesos la hora, pero que debido a la inflación la subió a 300. "Por lo general trabajo con chicos todo el año, para ayudarlos a que no se lleven ninguna materia. Los que saben que deben rendir necesitan unas 14 horas para preparase con anticipación y asegurarse aprobar", manifestó.

Muñoz contó que al momento de las consultas les advierte a los papás que no van a estar solos y que como máximo por clase recibe tres estudiantes. "No es cierto que si en una mesa tenés seis chicos todos reciben la atención que necesitan", destacó y contó que asignaturas teóricas, como el caso de Historia, prefiere que sea individual, ya que desconcentraría al resto de los jóvenes. 

Sobre el uso de los celulares indicó que al entrar a clases lo deja en una canasta. "Los mismos papás me piden que se los saque. Me gusta respetar el tiempo que pagan y que se conecten con el estudio. La familia hace un gran esfuerzo para que ellos aprendan", aseguró la maestra.

Al igual que en los casos anteriores, Patricia Chornomaz, quien da clases de apoyo durante todo el período escolar, destacó que recibe menos estudiantes y que los que van, optan por preparar la materia en menos horas. Coincidió con las materias más consultadas son y agregó Química. "Ver el programa completo sale de 2.500 pesos para arriba. No todos se llevan los cuatrimestres, por lo general son uno o dos", dijo. 

Chornomaz comentó que las clases son individuales, pero que hace excepciones cuando van chicos de un mismo curso. "Por ahí prefieren venir solos porque muchos son tímidos, no se animan a preguntar y desaprueban", detalló y expresó que durante su clase no permite el uso del smartphone

"Los padres hacen un esfuerzo para mandarlos y de entrada les advierto que no lo pueden tener. La única condición cuando ingresan a mi clase es que se pongan las pilas, si veo que no rinden en el segundo encuentro les aviso a los padres que busquen otro profe", acentuó.