Axel Fiks presentan en San Luis “Amante moderno”

Con un corte de cabello similar al que usaba Sandro en los '60, la misma mirada de galán y una bata azul de seda, Axel Fiks posa en la tapa de su primer disco de estudio, “Amante moderno”. El toque infaltable, que termina de confirmar una estética inspirada en "El Gitano", es el cigarrillo, encendido, en su mano derecha. Lo actual del material se encuentra en la música, con melodías experimentales que invaden a quien las escucha como un perfume.

Este sábado a la tarde, a partir de las 17, el cantante y compositor porteño inundará con su fragancia Comuna, el predio ubicado en Costanera Extremo Sur. Axel se presenta por primera vez en San Luis y en esta ocasión llega con una modalidad acústica. Antes, subirá al escenario Berlina, la cantante puntana que este año tuvo mucha actividad.

Con la única compañía de su guitarra, Axel tocará durante 90 minutos los temas de su nuevo disco, que combina indie, R&B y trap, mientras transita los estadíos de lo que él llama ser un amante moderno.

“Vendría a ser ese amante de hoy en día que quiere estar enamorado y considera al amor como la salvación y exaltación absoluta de los sentidos. Pero, a la vez, es muy temeroso de entregarse y salir lastimado. Creo que es algo que le pasa a mucha gente... incluido yo”, reflexionó el cantante.

Axel produce sus temas. Generalmente el proceso creativo inicia con un beat o un acorde de guitarra al que luego le suma las letras, que en su mayoría hablan de amor, desamor y relaciones tóxicas, todo en la era centennial, acorde a sus 23 años. Para componer, el proceso sucede exactamente a la inversa.

“Al momento de escribir, lo hago sin pensar que eso va a ser una canción. Lo hago para mí y porque me gusta como descarga, ejercicio y pasatiempo. Después, por ahí eso termina en un tema o no”, resumió.

El joven descubrió la música en la adolescencia, con un estilo que desarrolló su génesis en los taps y beats de electrónica que componía en su computadora. De allí pasó al indie y gradualmente terminó corriéndose a las mixturas experimentales que lo llevaron, mas no a burlarse, sino a inspirarse en Sandro para la tapa de su disco.

"Quería parodiar un poco esa estética y hacer una especie de tributo a ese Sandro galán de los '60.  Es una portada, tiene que transmitir algo y ser icónica. Además, quería que fuera un boom", justificó el “Niño amor”.