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El sector porcino cierra el 2021 con buena cara, pero hay preocupación

Las exportaciones cayeron en el segundo semestre e ingresó carne de Brasil, que es competencia desleal.

Por redacción
| 27 de diciembre de 2021
El sector necesita 35 mil madres para poder seguir creciendo. Foto: El Diario.

La producción porcina termina un buen año, algo que es mensurable debido a que a los productores les quedó una rentabilidad razonable, lo que no es sencillo en un país en constante crisis económica como es la Argentina.

 

 

Tanto los criadores como los empresarios pueden llegar al brindis con cierto respiro, pero aseguran que tiene más que ver con la alta eficiencia productiva que con los buenos precios. Si bien no son bajos, guardan una fuerte brecha con los de la carne vacuna, lo que por otro lado les permite competir en un panorama interno de bolsillos flacos. El kilo de carne de cerdo vale 240 pesos, mientras el de la vacuna vale más del doble, entre 470 y 500 pesos, según el sitio web Bichos de Campo.

 

 

Pero a pesar de ese buen panorama y un escenario que se presenta favorable en cuanto a la relación de costos e ingresos para el 2022, hay temas que siguen preocupando al sector porcino. En primer lugar, se viene dando una desaceleración notable de las exportaciones y un incremento de las importaciones. Esa carne
—usualmente de origen brasileño— se agrega a una producción local, que creció casi 7% este año.

 

 

Según los datos del Ministerio de Agricultura, las ventas al extranjero de carne porcina se derrumbaron desde julio y en los últimos cuatro meses bajaron 70% promedio. En el acumulado del año caerán un 20% como consecuencia de la menor demanda de China, que está recuperando su producción tras superar los peores efectos de la fiebre porcina africana, con niveles de productividad que hacen inviable el negocio exportador argentino.

 

 

En tanto, las importaciones tuvieron el camino inverso: aumentaron 75%. “Se trata de carne que ingresa principalmente de Brasil, consecuencia del atraso cambiario que tiene el dólar oficial. Es un producto que compite de forma desleal con la carne fresca que ofrecen los criadores locales. Eso nos tiene preocupados”, le dijeron al periodista Nicolás Razzetti fuentes de la Asociación de Productores de Porcinos.

 

 

En el sector creen que tanto la demanda china como las importaciones no tendrán cambios significativos en el corto plazo. En ese contexto, para mantener rentabilidad se requiere de mayor productividad, por eso buscarán incorporar más madres.

 

 

“Necesitamos sumar entre 35.000 y 40.000 cerdas al año y para eso hacen falta líneas de crédito”, aseguró Adolfo Franke, el titular de la Asociación de Productores de Porcinos, quien destacó la puesta en vigencia de los créditos anunciados para el sector, aunque aclaró que —si bien hay interés— su adopción marcha a ritmo lento por todo lo que implica tomar deuda en este contexto económico.

 

 

Redacción

 

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