El gobierno nacional rechazó ayer el pago de un bono de fin de año para jubilados y pensionados. La razón esgrimida fue que en diciembre tiene que desembolsar "53 mil millones de pesos" en sueldos y aguinaldos.
El jefe de Gabinete Jorge Capitanich, consultado por el bono extra, advirtió: "Es incumbencia propia de cada provincia y su respectiva autonomía de carácter fiscal".
Así lo señaló el director ejecutivo de la Administración Nacional de la Seguridad Social (AnseS), Diego Bossio, quien indicó que el Ejecutivo nacional está "haciendo un gran esfuerzo para pagar en tiempo y forma" los aguinaldos, las jubilaciones y las pensiones.
"En el mes de diciembre tenemos pensado pagar jubilaciones y pensiones por 53 mil millones de pesos. Una cifra realmente muy importante. Un cuarto del presupuesto anual de toda la provincia de Buenos Aires. Un 25% de todo el presupuesto, o más", justificó Bossio.
La polémica frente a las explicaciones oficiales es que los fondos de los jubilados sirven, por decisión presidencial, para afrontar varios programas oficiales que no benefician a los integrantes de la clase pasiva.
La AnseS tiene a su cargo la financiación de los planes Procrear, Progresar, ProCreAuto, la Asignación Universal por Hijo (AUH), y los subsidios por embarazo, entre otros programas sociales. Además aporta al Tesoro mensualmente fondos para paliar el déficit fiscal.
Hasta el 31 de agosto -último dato difundido por el Ministerio de Economía-, el ente previsional había girado al Tesoro Nacional 45.175 millones de pesos.
Si se agrega setiembre y octubre, a un promedio de 5.500 millones por mes, la cifra de transferencia se eleva a más de 56 mil millones de pesos, según surge de datos oficiales y estimaciones privadas.
Consultado, en conversación con Radio La Red, por la posibilidad de que el Gobierno realice un pago extra a fin de año para este sector, el titular de la AnseS respondió que no tienen "previsto nada".
En su lugar, el funcionario decidió destacar que "éste fue un año en el que el Gobierno pudo cumplir con los dos aumentos como marca la Ley (de Movilidad Jubilatoria)". Un esfuerzo algo llamativo, porque si no lo hiciera el kirchnerismo estaría incumpliendo con la norma que fue sancionada en octubre de 2008.
El defensor de la Tercera Edad de la Ciudad de Buenos Aires, Eugenio Semino, cuestionó al gobierno nacional. "El bono era algo realmente muy esperado por los jubilados porque este año hubo un desfasaje real entre lo que es su haber y el costo de su canasta", expresó.
Indicó que el costo de la canasta del jubilado se ubica "en más de 6.500 pesos", y la jubilación mínima actual es de 3.230 pesos.
El ombudsman de la Tercera Edad lamentó que "la saludable costumbre de ese bonus, que se dio entre el 2008 y el 2010 (en ese año fue de 500 pesos) se cortó".
"Hoy un 53% de los jubilados percibe la mínima y un 30% cobra entre los 3 mil pico y los 6 mil pesos. Es muy difícil vivir con esas sumas en Argentina", puntualizó Semino.
LA MEJOR OPCIÓN PARA VER NUESTROS CONTENIDOS
Suscribite a El Diario de la República y tendrás acceso primero y mejor para leer online el PDF de cada edición papel del diario, a nuestros suplementos y a los clasificados web sin moverte de tu casaMás Noticias
