Soledad García, la "chica 10" del hockey que enseña en San Luis

Antes daba clases de técnica individual en la alta competencia, en la cancha y como una de las jugadoras estrellas de las Leonas; ahora da clases desde las bases, como entrenadora y en GEPU, en San Luis, lejos del ruido de las grandes ciudades argentinas que son potencia en el hockey sobre césped.
Es la cordobesa Soledad García, quien a los 32 años (12 de junio de 1981) decidió ser una ex jugadora al ponerle fin a su carrera profesional tras el partido homenaje en El Ave Fénix.
La realidad dice otra cosa. Muestra que podría seguir en acción como una de las más desequilibrantes de este deporte. Pero los cortocircuitos con la Selección Argentina aún siguen escondiendo chispas. “Después de un tiempo uno se va adaptando y acepta las cosas como fueron, aunque todo fue muy raro”, cuenta Sole, quien tuvo roces con el cuerpo técnico encabezado por Carlos Retegui, tras los Panamericanos de 2011, en Guadalajara. 
No se escapa del tema y habla de sus compañeras, del equipo actual del seleccionado: “Las chicas están acostumbradas a un trabajo desde el 2010, la estructura de trabajo la tienen incorporada, no sé los objetivos generales”.
El presente es San Luis, donde vive con Nicolás Aostri, su novio, a quien conoció en Córdoba. “No, todavía no nos casamos”, dice y sonríe ante la inquietud de El Diario de la República. Así, logramos sacarla de un tema que una y otra vez deberá responder: ¿Por qué se fue? ¿Por qué la Federación Argentina nunca tuvo un mensaje claro en cuanto a su situación?
Volvemos al presente, que la tiene como coordinadora de GEPU, que se prepara, como todos los equipos, para el comienzo del campeonato provincial. “Arrancamos este fin de semana el torneo. Estoy entusiasmada, tratando de corregir un montón de cosas”. Junto a Sole están Roberto Rinaudo, como delegado, Sebastián Lucero y Romina Osuna, como entrenadores que trabajan a su lado.
GEPU conformará una unión con Las Lomas, aunque llevará solamente el nombre del primero.
Asimilando el duelo pos abandono del profesionalismo como jugadora y encarando otra etapa, la cordobesa, que surgió en Universitario, dice que está “contenta” aunque aún "acomodándome y adaptándome a esta ciudad nueva, cómoda y en la cual estoy muy bien trabajando con el club”.
Sole sabe que “la cancha de césped sintético es un empujón grande, de todas formas hay que darle más uso. Ahora el torneo arranca en El Ave Fénix y hay mucho por hacer”, remarca García, quien adelanta que “este año, por decreto del gobierno, vamos a tener un piso sintético en GEPU. Y hay que apuntar a más canchas”.
Si las comparaciones de por sí son odiosas, mucho más lo es ubicar a San Luis en paralelo con otras ciudades que practican hockey: “Buenos Aires nos lleva años luz y Córdoba está a la altura. A San Luis le falta un impulso estructural para crecer y cambiarle a las chicas lo básico, desde lo técnico”. Eso como lo primordial, es lo que piensa la “chica 10”.
La delantera, que jugó en Rot Weiss de Alemania, Universitario de Córdoba, Push, Laren y SCHC de Holanda, deja bien marcado que “hay diferencias entre un (piso) sintético de agua y uno de arena. Y la diferencia es grande, como que la cancha de agua (como la del Ave Fénix, con todo lo que pide la Federación Internacional) es más pesada y eso lleva a que haya que corregir, y bastante, la técnica de las jugadoras”.
Pensando en objetivos, Sole es clara: “La proyección es a cinco años. Mientras, habrá que hacer un análisis permanente”.