El deporte es la mejor inversión en salud, en contención social. Fundamentalmente por eso contamos con un Ministerio de Deportes, consideramos el fomento de la vida sana como una política de Estado. Por eso hoy firmamos estos primeros convenios, porque ayudarán a que nuestros chicos crezcan sanos", con esa frase el gobernador de San Luis, Claudio Poggi explicó con contundencia los motivos que lo llevaron a realizar una nueva inversión relacionada a las actividades deportivas.
En esta ocasión la disciplina que gozará de un nuevo impulso será el fútbol infantil. Llegará a través del Programa de Desarrollo del Fútbol Infantil y Juvenil que depende del Ministerio de Deportes y consiste en convenios voluntarios que firmarán clubes federados a las ligas del fútbol local con el Estado puntano y que tiene como principal objetivo darle mejor y mayor contención a los pequeños fanáticos de la redonda.
Estado puntano otorgará a las entidades aportes de hasta 200.000 pesos (divididos en cuatro cuotas de $50.000)
La firma de los primeros quince convenios tuvo lugar ayer por la tarde en el Salón Blanco de Terrazas del Portezuelo, durante un acto que fue encabezado por el gobernador Poggi, por ministros y los presidentes de las tres ligas federadas que posee la provincia: Bartolomé Abdala (Sanluiseña), Mario Echevarría (Villamercedina) y Marcelo Demarchi (Conlara). Cientos de chicos, vestidos con los colores de sus equipos, le dieron el color y calor al encuentro.
Las instituciones que dieron el puntapié inicial en esta primera etapa fueron Huracán, Defensores del Oeste, Victoria, GEPU y CAI (todas de la Liga Sanluiseña). Sportivo Mercedes, Pringles, Racing, Pueyrredón y Aviador Origone (Liga Villamercedina). Pringles (Santa Rosa), San Martín (Merlo), Deportivo Naschel, Sarmiento (Tilisarao) y Deportivo Villa Larca (Liga del Valle del Conlara). Pronto se sumarán más instituciones.
Según el convenio, el Estado puntano otorgará a las entidades aportes de hasta 200.000 pesos (divididos en cuatro cuotas de $50.000). El dinero deberá ir destinado a mejorar canchas, cerrar el perímetro de la misma, riego, iluminación, vestuarios o sanitarios. A medida que la dirigencia haga las rendiciones de cuenta, recibirán las cuotas.
Pero para que esos fondos lleguen a las arcas de los clubes, a cambio tendrán que promover, dentro de sus comisiones directivas, a un dirigente del fútbol infantil. Como mínimo, ese directivo deberá convertirse en el nuevo vicepresidente. La idea es que las divisiones menores sean respetadas y formen parte en la toma de decisiones de cada entidad.
El Estado apoyará a esos directivos con capacitaciones a las que tendrán que asistir clase tras clase.
A mejorar desde las bases
Para que los chiquilines alcancen una evolución deportiva, el Gobierno pagará el sueldo de dos entrenadores durante dos años. Esos directores técnicos tendrán que estar recibidos (como DT o profesores de educación física) pero serán elegidos por los propios clubes.
El objetivo es que, a partir de esta nueva etapa, los encargados de ponerse delante de los chicos sean profesionales capacitados.
Pero para que la tarea fuera completamente feliz, Poggi anunció la construcción de cuatro complejos deportivos destinados netamente para el fútbol infantil. Tendrán canchas de distintas medidas, con todos los servicios y se construirán una en San Luis (capital), otra en Villa Mercedes y las dos restantes en el Valle del Conlara. Quedó claro que el Estado juega para los chicos.
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