Desde el microcentro hasta las bicisendas, en los alrededores de la ciudad, los controles viales son permanentes, casi como los incumplimientos. Durante la semana pasada, el personal de la Subsecretaría de Seguridad Vial labró 160 actas de infracción y secuestró 36 ciclomotores, más un remise que circulaba con una oblea apócrifa.
"Nuestra actitud no es compulsiva ni recaudatoria, sino que velamos por la seguridad de todos"
Los operativos tuvieron como escenarios diferentes arterias principales, como la 25 de Mayo, avenida Mitre y Pringles. Pero también en las bicisendas verificaron que no circularan motocicletas ni automóviles. “Cambiamos de lugar para no hacerlo habitual a un sitio donde toman por costumbre evitarlo, y ver si los 'pescamos' en alguna infracción”, detalló Roberto Lozada, el subsecretario de Seguridad Vial.
Los vehículos retenidos fueron trasladados al depósito donde residirán hasta que los dueños tramiten la multa en el Tribunal de Faltas Municipal.
En general, los incumplimientos que más cometen los conductores, están referidos al estacionamiento indebido: sobre el lado izquierdo, en lugares prohibidos, sobre paradas de taxis y en las subidas para discapacitados. También muestran falencias en las licencias de conducir, algunas están vencidas y sin renovar, o directamente no cuentan con ella. Los motociclistas denotan la falta de casco, y en algunos casos lo llevan en el brazo.
“Pareciera que a la gente le entra más fácil por el bolsillo que por la cabeza. No podemos permitir generar un tránsito desordenado. Tenemos que acompañar con medidas que vayan dando seguridad permanente a los ciudadanos. Nuestra actitud no es compulsiva ni recaudatoria, sino que velamos por la seguridad de todos”, apreció el funcionario.
Ordenamiento vial y controles nocturnos
El subsecretario señaló que otras de las inspecciones las realizan en las escuelas. El ingreso y la salida de los alumnos suele ser uno de los mayores problemas que atentan contra el orden vial. La modalidad que adoptan es que sean rotativos y los practican por la mañana, al mediodía y a la tarde. “Aunque no tenemos la cantidad de patrullas para cubrir cada colegio, vamos de a una para que nuestra presencia haga tomar conciencia a los que estacionan en doble fila o en contramano”, indicó.
Los fines de semana, especialmente, los operativos nocturnos apuntan a los tests de alcoholemia. "Los hacemos normalmente a la madrugada, en distintos horarios o cuando lo solicita la policía. Retenemos al conductor, pero dejamos que llame a alguien para que lo lleve hasta su casa", afirmó.
El área cuenta con una sola camioneta y los móviles policiales que colaboran. Sin embargo, Lozada adelantó que el lunes el intendente Mario Merlo firmó el decreto para que puedan comprar dos utilitarios más.
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