Costará 80 mil pesos arreglar una estación meteorológica

Ahora los vecinos de San Francisco deberán recurrir a métodos antiguos para averiguar la temperatura, la humedad y la cantidad de milímetros de lluvia que cayeron en el pueblo, ya que destruyeron la Estación Meteorológica de la red que pertenece a la Universidad de La Punta. “Es una pena, nos puede llevar un mes y medio reparar los equipos, más un costo de ochenta mil pesos, si es que el precio no varía en el tiempo; además del quiebre de la serie histórica de eventos climáticos”, dijo el secretario de Ciencia y Técnica de la ULP, Pablo Da Rold, quien junto a su equipo calculó que los destrozos fueron cometidos el sábado a la madrugada.  

“Las trabas a la importación son lo más grave, es complicado conseguir los equipos".

Hace tres meses, debido a algunos reclamos de los vecinos, el personal que repara y controla las estaciones, llegaba con regularidad hasta el complejo.

“Estaba funcionando bien, pero como dejó de transmitir y tenía interferencias, el equipo de trabajo fue a revisar qué estaba pasando en la máquina. Al llegar encontraron el cerco roto, habían abierto el datalogger, que ya no sirve más; y partieron al medio el sensor de temperatura y humedad”, aseguró Da Rold.

La máquina está compuesta por tres sensores: uno se encarga de medir la lluvia; otro la temperatura y la humedad; y el tercero funciona de manera  combinada.

“La estación posee un sistema de cableado, tarjetas de memoria y accesorios, para que se pueda grabar y transmitir la información que viaja por autopista. Es difícil pensar que se trató de un accidente porque está todo cercado con alambre púa por encima y olímpico alrededor”, explicó  el secretario de Ciencia y Técnica.

Hasta ayer no había indicios sobre los autores de la destrucción,  pero se abrirá una investigación. “El último dato que tenemos de la estación fue el sábado”, dijo Da Rold y agregó: “Es la primera vez que tenemos este tipo de situaciones, porque las estaciones son muy valoradas por la gente de los pueblos, ya que son datos locales de actualidad que no se pueden encontrar en ningún otro lado. No sabemos quién fue pero el daño cometido fue intencional”.