El homicida está ahí, se lo ve junto al auto de la víctima cuando le descerraja diez balazos. Su figura fue grabada por una cámara de seguridad ubicada a dos cuadras. La imagen no es nítida, por la cantidad de luz que había en la esquina de Ardiles y Guayaquil, en el barrio Justo Daract de Villa Mercedes, y porque la calidad de la filmación no es de lo mejor. Al matador se lo ve entre sombras. Y eso ha contribuido a que siga así: a cinco meses del asesinato del auxiliar de Policía Rodolfo Domínguez, su identidad no ha salido a la luz.
El dato de que la cámara más cercana al escenario del crimen captó al autor no había trascendido. La jueza que dirige la investigación, Mirta Ucelay, del juzgado Penal Nº 3, se lo confirmó a El Diario: “Se individualiza a una persona en el lugar del hecho, pero la imagen, aunque se suma como indicio, no alcanza para identificarla”, explicó.
Más Noticias