Nada tiene sentido para los familiares de Florencia Belén Bringas. Seguramente no paran de repasar en sus cabezas el hecho de que la joven no era de conducir a alta velocidad ni, mucho menos, ebria. Para nada, ella era muy responsable cuando estaba detrás de un volante. Por eso, lo que sucedió la madrugada de ayer no sólo los destruyó y los sumió en el más profundo desconsuelo sino que también los descolocó. En algún momento, cuando la chica regresaba a su casa del barrio Independencia de Villa Mercedes, el mando de su Ford Fiesta Max se le fue de las manos. En una maniobra que los peritos aún no logran explicar, el coche viró y se estrelló contra un árbol, y su conductora murió en el acto.
La víctima tenía 20 años. Según informó el personal de Cuerpo de Tránsito, la causa fue un fuerte golpe en la cabeza.
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