Caso Mateo: piden una pericia psiquiátrica para la madre

El defensor oficial que asiste a María del Carmen García, la mujer que dejaba encerrado, encadenado y amordazado a Mateo, su hijo de 7 años, le pidió ayer a la jueza Virginia Palacios que ordene una pericia psicológica y psiquiátrica para la acusada. García está detenida junto a su esposo, Antonio José Torres, desde el sábado, cuando la familia Guerra, vecina del mismo inquilinato donde ellos vivían junto a sus tres hijos, denunció el maltrato al chico.

El domicilio de Belgrano 1642, media cuadra al oeste de la avenida Lafinur, de donde la Policía, con autorización de la jueza de instrucción Penal Nº 3, Virginia Palacios, rescató al nene, probablemente sea inspeccionado otra vez. Ésa es otra de las pruebas que el defensor oficial Carlos Salazar le pidió a Palacios ayer, en el escrito en el que solicitó el examen mental para la acusada.

También le requirió que llame a declarar a todas las personas que figuran como testigos en las actuaciones que hizo la Policía a partir de la denuncia de Guerra.

La defensa de Torres, por su parte, podría cambiar de manos en las próximas horas. Hasta ayer estaba a cargo del defensor oficial subrogante Juan Esteban Pedernera. Pero la familia del hombre estaba en tratativas con una dupla de abogados que podría asumir en las próximas horas, según le confirmó ayer a este medio uno de los profesionales en cuestión.

El padre y la madre de Mateo están acusados por el mismo delito: abandono de persona doblemente agravado, por resultar grave daño en la salud de la víctima y por el vínculo, y por privación ilegítima de la libertad, agravada por mediar violencia. Hasta ahora, la jueza no ha distinguido grados de responsabilidad entre una y otro. Los considera coautores.

Pese a ello, no tienen el mismo defensor. Aunque todavía ninguno de los dos accedió a declarar ante la jueza, hay indicios de que Torres piensa acusar a su mujer por el trato denigrante al chico. La responsabilidad de ella es obvia. Pero pareciera que el padre intentará mostrarse ajeno a todo.

Ésa fue la impresión que tuvo el defensor Salazar cuando habló con ellos, antes de la audiencia a la que los llevaron el lunes, para ver si declaraban. Por eso planteó que “habría intereses contrapuestos” entre ambos y pidió que convocaran a otro defensor.

Otra señal de que Torres pretendería decir que no sabía nada de los tormentos a su hijo la dio él mismo, el lunes, cuando lo entraban al juzgado. Ante una pregunta de un periodista de si pensaba culpar a su mujer, no habló, pero, encapuchado como lo llevaban los policías, asintió con la cabeza.

Una fuente de tribunales consultada anoche reveló que la defensa de Torres presentaría hoy una prueba con la que pretendería acreditar la inocencia del hombre. Y que, incluso, en el mismo acto le pediría a la jueza que interrumpa la prórroga de la detención, para que resuelva cuánto antes sobre él.

Salazar no cree que el resultado del examen psiquiátrico y psicológico a la madre acusada esté para mediados de la semana próxima, cuando la jueza Palacios tenga que resolver si la procesa y encarcela en forma preventiva.

El defensor dijo que no tiene ningún indicio para suponer que García padece algún grado de discapacidad o alteración mental. “No lo sé, no soy especialista, por eso solicito el estudio con los especialistas del Poder Judicial. Ellos determinarán si es una persona hábil o no en cuanto a lo que ha sucedido”, contestó.

Aunque no pudo precisar qué nivel de instrucción escolar ha recibido la mujer, el funcionario judicial no duda de que García “tiene una deficiencia cultural”. De todos modos, aclaró: “No sé si eso puede ser determinante para que ella llegue o no a comprender la criminalidad del hecho” que investigan.

Salazar da casi por sentado que no va a hacer que la madre de Mateo declare en los próximos días. “Si surgiera alguna cuestión nueva de las testimoniales que hemos solicitado, ahí recién podríamos evaluar la posibilidad de pedir una ampliación de indagatoria”, reveló.