Esto es un sueño, en los enlaces no hago otra cosa que pensar en donde estoy, que pilotos tengo arriba y los otros que están por detrás. No lo puedo creer".
Con escucharle la voz es suficiente para ponderarle las pocas palabras que deslizó, el trajín de la competencia pasa factura a cada instante, aún así Martín Duplessis atendió desde La Paz, Bolivia a El Diario.
Con una moto alquilada, bajo presupuesto y las ganas necesarias como para hacer historia, el piloto de Villa Mercedes marcha noveno en la general de la competencia más importante del mundo: el Dakar.
"Tengo ganas de más, físicamente estoy bien a pesar de que estas cinco etapas fueron muy duras. Algo importante fue que la altura no me pesó", contó Martín desde el Vivac de La Paz, en donde pasará una tranquila noche ya que hoy será la jornada de descanso.
"Nos vino bien a todos esta suspensión -ayer por el agua no se corrió la sexta etapa, aunque los corredores tuvieron que hacer el enlace en sus vehículos-. Venía durmiendo tres o cuatro horas diarias. Porque cuando terminamos las etapas, tenemos que planear la del día siguiente, además de ir a una reunión de pilotos obligatoria y entre una cosa y la otra nos acostamos a las 23 y a las 3 ya estamos arriba", explicó Martín, el único piloto privado que está en el Top Ten.
Con respecto a su performance en estas primeras jornadas el villamercedino dijo: "Nunca estuve al límite, incluso cuando me caí. Voy a un 70% u 80% de lo que puedo dar y aun así no estoy lejos de los tiempos. Trato de dejar al margen cualquier tipo de peligro. Además son consientes que cualquier error me pueden penalizar y se caería todo por la borda".
Duplessis irrumpió en el Dakar en la edición anterior y como novato consiguió un sorprendente puesto 25º, que lo consagró como el segundo mejor piloto argentino en la general, en su segunda edición tiene claro el plan de carrera para lo que resta: dos etapas en Bolivia y el paso a la Argentina con cinco restantes.
"El Dakar se corre con la cabeza. No se corre con el acelerador, ni con el corazón, sólo con la cabeza y eso es lo que trato de hacer día a día. Voy a seguir como vengo, por ahí me voy a afianzar un poco más cuando volvamos a la Argentina, que son caminos a los que estoy más acostumbrado, pero aún falta mucho y prefiero ir paso a paso".
Facebook, una de las herramientas de comunicación más fuertes de hoy, mantiene a Martín en contacto con los seguidores que tiene en San Luis: "Las muestras de apoyo son increíbles, me mantienen el espíritu siempre en alto. Espero que el paso de la caravana por San Luis, sea multitudinaria. Quiero verlos a todos en Merlo".
Acompañado por la familia y amigos
Martín no está solo en este periplo sudamericano, además del equipo, viaja con toda su familia, amigos y hasta con sus perros.
La caravana está dividida en tres. En el motorhome viajan su papá Jorge, su mamá "Kuki", su hermana Daniela y el jefe de prensa, José Luis Casiva. En las camionetas van sus amigos: Alejandro Marafini y Santiago Leyria en una y como segundo apoyo Luis Zabala, su hijo y Juan Concianci. "Seguimos a Martín y lo esperamos en cada asistencia, dormimos en el motorhome y no tenemos horario para comer, comemos lo que podemos en cada lugar", contó desde Bolivia.
LA MEJOR OPCIÓN PARA VER NUESTROS CONTENIDOS
Suscribite a El Diario de la República y tendrás acceso primero y mejor para leer online el PDF de cada edición papel del diario, a nuestros suplementos y a los clasificados web sin moverte de tu casaMás Noticias
