Una obra que será un salto al futuro en diseño y funcionalidad

El miércoles por la noche se adjudicó la imponente obra del nuevo Hospital Central, que será ejecutada por una UTE (Unión Transitoria de Empresas) de las constructoras puntanas Semi SA, Green SA y Lumma SA. En Terrazas prometen que este proyecto de inversión, sin precedentes en la provincia, traerá soluciones a corto y largo plazo en cuanto a las necesidades de salud que tiene San Luis.

Respecto al pliego original, se ejecutará con ligeras modificaciones en cuanto al diseño. En el Ministerio de Obras Públicas aseguraron que una estructura envolvente rodeará los 50 mil metros cuadrados de edificio, cumpliendo una doble función: hacer de parasol y dar un estilo arquitectónico único. Confirmaron también que la propuesta no modificará las prestaciones y tecnologías previstas, que se cumplirán al 100% en la obra.

"La variante principal que plantearon las empresas es la cobertura total envolvente, que será sobre las fachadas —en vez de la parte superior—, por un tema de imagen y de solución a la aislación. La parte arquitectónica se respeta y, en líneas generales, la propuesta es bastante precisa y cumple con el 100% de las necesidades que planteó el pliego en cuanto a tecnología, equipamiento y camas", aseguró Felipe Tomasevich, ministro de Obras Públicas.

La UTE participó de la licitación y presentó tres propuestas con distintos montos de inversión. Una Comisión Evaluadora, integrada por once miembros de Vialidad Provincial, Infraestructura Energética, Infraestructura Hídrica, y de los ministerios de Obras Públicas, Ciencia y Tecnología, y Salud; determinó que la primera alternativa propuesta sea la indicada.

"Es un monto de adjudicación de 7.099 millones de pesos, un 4% por arriba del presupuesto oficial. Teniendo en cuenta la inflación que se sucedió en estos últimos dos meses —desde que se llamó a licitación— es un monto óptimo, razonable, porque además cumplimenta el 100% de los requisitos del pliego original", manifestó Tomasevich.

(Vidriado. Interacción con el exterior para la comodidad de todos)

Es decir que el nuevo Hospital Central, tal como estaba previsto, tendrá 400 camas, 16 quirófanos, 40 departamentos que harán de residencias médicas, la adaptabilidad para el funcionamiento de un Hospital Escuela, y más de 50 especializaciones que estarán a disposición de todos los puntanos.

El ministro afirmó que "el Hospital Central va a tener un gran impacto regional. Es un instrumento más dentro de la política sanitaria que planteó el gobernador Alberto Rodríguez Saá en este mandato", y luego agregó: "Es una visión a largo plazo, que viene a cubrir necesidades del corto plazo. Permitirá un gran desarrollo y un gran empuje a toda la política de salud".

Con las residencias médicas, las especializaciones y la posibilidad de que el edificio se adapte a la funcionalización de un Hospital Escuela, en el Gobierno aseguraron que esperan que este centro sanitario genere un gran atractivo para los profesionales médicos. De esta forma, darían una fuerte pelea al problema —a nivel nacional— de la falta de recursos humanos en el campo de la salud.

Otro de los objetivos que planteó el Estado puntano en la elaboración del pliego original fue que el edificio cumpla los requisitos exigidos para la obtención de distintos reconocimientos en los más altos estándares.

"El hospital va a tener las máximas certificaciones a nivel mundial, en cuanto a todo lo que es arquitectura y tecnología en hospitales", aseveró Tomasevich.

En total serán siete las certificaciones, entre las que destacan la de la Organización Mundial de la Salud, la que otorga la Organización Panamericana de la Salud, la "Joint Comission International" (máximo estándar global en salud), y la "Stage 7" (calificación que se da a edificaciones dotadas de las últimas tecnologías.