Caputo descansó en las playas de Río en el inicio de la corrida cambiaria

Bronceado, relajado y listo para esperar septiembre con energías. Así parece haber encontrado al presidente del Banco Central, Luis Caputo, la inolvidable semana en que el dólar llegó hasta los 40 pesos en la Argentina.

Unos días antes, Caputo se tomó unas minivacaciones en Río de Janeiro, en Brasil. El fin de semana largo, del 17 de agosto, el funcionario de Mauricio Macri estuvo en el “Hotel Sofitel de Ipanema”, "cuando el dólar oscilaba recién entre los 29 y 30 pesos”, de acuerdo a una nota publicada por el Diario Perfil.

En las fotos, difundidas por el medio de Buenos Aires, el presidente del Central camina y duerme una siesta en la playa con short azul, remera roja y una lona rayada. El feriado que conmemora la muerte del general San Martín, trasladado del viernes 17 al lunes 20, le permitió al funcionario ver el sol antes del infierno cambiario.

Caputo “no se veía venir aún la megadevaluación que esta semana lo llevó (al dólar) hasta los $ 40, en el nuevo peor momento de la gestión de Macri. Tal vez por la desconexión de los recién llegados de la escapada a la playa; o por la falta de libertad para actuar en el mercado, que implica el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), Caputo pareció primero tratar de frenar la divisa, luego dejarla correr para luego salir a contenerla otra vez”, explicó en la nota para Perfil, el periodista, Jairo Straccia.