Por segunda vez en el mes, Churquina se burló de las cárceles

Cada día que pasa, Rafael Dante Churquina se supera. Demostró en más de una oportunidad que llevar adelante negocios narcos detrás de las rejas es más que posible.

Demostró en más de una oportunidad que llevar adelante negocios narcos detrás de las rejas es más que posible. El miércoles 13 fue sorprendido con varios celulares y una agenda de contactos en su celda de la Penitenciaría de San Luis, donde cumplía una condena por abuso sexual y sobrellevaba su procesamiento por liderar, desde la cárcel, una banda que vendía cantidades millonarias de droga. Para evitar que se volviera a burlar de la seguridad, el hombre fue trasladado de inmediato a la prisión de máxima seguridad de La Botija. Pero, según trascendió, el cabecilla narco volvió a dejar en ridículo al sistema de seguridad del Servicio Penitenciario: lo encontraron por segunda vez en el mes con un aparato para contactarse con otros, esta vez, una computadora.

La notebook fue hallada por un agente penitenciario que requisó la celda que Churquina ocupa en el Módulo 3 de Pampa de las Salinas. Según lo trascendido, la computadora es, en realidad, de otro interno, pero al momento del hallazgo estaba en manos del narco. 

La novedad tomó por sorpresa hasta a su propio defensor, Germán Anabitarte. Este medio se comunicó con el abogado de Villa Mercedes y le consultó sobre este nuevo capítulo en el que su cliente dejó en jaque al sistema carcelario. El letrado dijo no estar al tanto de tal hecho, pero no le pareció que algo así "fuera real", porque está en la cárcel de máxima seguridad de la provincia.

El miércoles 13, cuando la directora general del Servicio Penitenciario, Karina Mantelli, dispuso su inmediato traslado desde el Penal de San Luis al de La Botija, en su resolución no admitió que tal disposición se debía al hallazgo de teléfonos celulares y una agenda, sino que argumentó que se trataba de "optimizar el régimen penitenciario tendiente a buscar mejores resultados médicos, tratamientos y actualización del mismo”. El Diario intentó más de una vez comunicarse con Mantelli, pero no contestó los llamados.

Churquina está preso desde el 21 de octubre de 2019, cuando lo arrestaron por violar una restricción de acercamiento y abusar sexualmente de su expareja, a quien sometía a violencia de género. Por esa causa fue procesado con prisión preventiva. El 3 de junio de 2022, un tribunal de Villa Mercedes lo condenó a seis años y dos meses de cárcel.

Poco más de un año después, el hombre de 38 años por entonces volvió a sorprender a todos, más que nada al personal penitenciario: le encontraron drogas, cinco celulares, una notebook, anotaciones de pagos e itinerarios.

Esos elementos estaban ligados a una venta narco que quedó trunca en Jujuy, cuando otros dos sospechosos intentaron entregar una mochila con unos cinco kilos de cocaína a dos hombres.

El destino de esa sustancia era Villa Mercedes. Las averiguaciones apuntaron a un subdirector y a un jefe de una unidad penitenciaria. Esa causa tiene, desde diciembre, a diez personas procesadas. 

Redacción/MGE