La entereza de Juanón superó el sentido de las emociones

Juanón Lucero eligió el rojo y el negro para la presentación de su disco "Versos de amor". Un sombrero panamá, a cuadros, fue el único atuendo alejado del vestuario nacional completado por una bombacha, botas de cuero, pañuelo al cuello, funda salteña y cinturón con tachas.

100 pesos cuesta el disco presentado el jueves. Se llama "Versos de amor" y contiene 12 temas.

Fue una noche de emociones fuertes que el popular folclorista sobrellevó con entereza y con alguna lágrima. Su hija subió a regalarle un ramo de flores, el gobernador Claudio Poggi lo condecoró como Embajador de la Cultura puntana y los espectadores lo aplaudieron cuando se puso a cantar. "He perdido algunos kilos, pero no la voz", dijo el homenajeado.

El jueves a la noche en La Casa de la Música todo giró en torno a Lucero. Su nuevo disco fue una excusa para repasar anécdotas de su vida de la mano de Nino Romero, el reconocido locutor que lo entrevistó frente a unos 200 invitados especiales.

Dijo que comenzó a tocar la guitarra gracias a dos hermanos, que al principio de dedicó a la cumbia y que en los 30 años que lleva de profesión recorrió buena parte de los festivales nacionales.

Frente a su público, Juanón no dejó tema sin tocar. Uno de los más sensibles, lógicamente, fue el de su salud. "La estoy peleando, no es el mejor momento de mi vida, pero la música me cura el alma", dijo el cantante, quien aseguró que se subirá a todos los escenarios que su salud le permita.

Pero los aplausos más convincentes llegaron cuando Juanón hizo lo que mejor le sale. Una versión de "Caña doble" -su máximo éxito- y el recitado de "Viva San Luis carajo", que cerró el recital y sumó emoción entre los amigos de la puntanidad.