Merlo: el fin de semana termina un curso internacional de yoga

Quizá por su tranquilidad y por la belleza de los paisajes que lo rodean, los organizadores del Seminario Internacional de Yoga, eligieron el Hotel Piedra Blanca de Villa de Merlo, allí decidieron retirarse para entrenar a profesores que enseñan la disciplina. “Éste es un curso intensivo para profesionales que tienen la intención de  enseñar. Antes los grandes maestros bajaban y seleccionaban a quienes ellos querían transmitirle los conocimientos y sus métodos; actualmente es diferente, ahora es el alumno es el que elige al profesor”, explicó Jordys González, socio y colega de José Antonio Cao, ambos están a cargo del programa Nexo Yoga, que fue diseñado para ayudar a los profesores a ampliar, profundizar y fortalecer sus herramientas didácticas.

Ambos son españoles y primero pasaron por Colombia para hacer lo mismo. El encuentro comenzó el pasado 11 y será hasta el próximo domingo.

González explicó que “convertirse en un profesional de la enseñanza implica poder decir que no a quienes deban diagnosticarse primero o para quienes no encaja el yoga, porque no es para cualquiera”.

Los cuarenta y dos asistentes pudieron aprender a diseñar, secuenciar y gestionar cursos completos de yoga, que faciliten el crecimiento personal, el auto descubrimiento y la motivación de sus grupos de alumnos. “Buscamos que el profesor pueda vivir de la enseñanza dignamente al entregar valor. Enseñar a una persona a utilizar herramientas para solucionar sus propios problemas para crecer internamente, para desarrollarse como persona o para eliminar un dolor, entre otras cosas”, dijo González y aseguró que el concepto de paciente en yoga no existe, sino que se toma esta herramienta para solucionar un problema o llegar a un fin.

González hizo hincapié en que la metodología con la que trabajan no está dirigida a un método específico, ni rivaliza con ninguno. “Aquí participan personas de otras provincias y de América latina, que provienen de diferentes escuelas, les mostramos la pedagogía para que un profesor sea capaz de estudiar su método, enriquecer sus clases y alinearse con la misión que tienen”, afirmó y agregó que “de lo contrario el concepto de yoga se pierde, porque estamos en una generación en la que ya no hay grandes maestros porque han fallecido, e intentamos relevarlos para dejar enseñanzas lo más limpias y afines al mundo occidental”.

Hubo profesores de distintas provincias argentinas, de Chile, Paraguay, Perú y de Uruguay, entre otros países.

“El proyecto se llama Nexo Yoga, significa que a nuestro enfoque puede entrar cualquier tipo de personas que tenga distintos estilos de práctica, porque al final entendemos que una rodilla es la misma aquí, en Chile y en Japón; cómo se mueve una articulación o cómo debe conectar el fémur con la cadera. La seguridad en la práctica y en la enseñanza surge porque somos afines”, concluyó.

Los seminarios cuentan con el apoyo de la Unesco, que participa de los encuentros para grabarlos, entrevistar a los asistentes, fotografiar y documentar las clases teóricas y prácticas. Con el material que reúnan crearán y presentarán un archivo documental a las Naciones Unidas de todas las Artes, ya que buscan crear la Primera Organización Internacional de Yoga protegida por la Unesco.