Como congelados en el tiempo, así estaban en un aula del Instituto Superior de Seguridad Pública “Coronel Juan Pascual Pringles”, 49 fusiles Mauser desactivados, que la Policía utilizaba en los años 60’. A su lado y apiladas en una estantería, docenas de pistolas de puño y ametralladoras, no veían la luz desde que en el 2010, el Renar (Registro Nacional de Armas) impidiera su uso. El exilio terminó esta semana cuando abrieron la sala, lo que permitirá volver a emplear estas armas en desfiles y entrenamientos. “Gracias al ministro de Educación Marcelo Amitrano y al rector de la institución Oscar Alberto Magni Oga pudimos recuperarlas”, destacó la vicerrectora del establecimiento Ana Abrahín. Ahora el armamento quedará en manos de la Policía y los estudiantes del instituto podrán utilizarlos en caminatas de días patrios.
Las armas, que pertenecen originariamente a la Jefatura de Policía, eran utilizadas por los cadetes en sus prácticas y desfiles protocolares, explicó Abrahín. ¿Por qué el Renar impidió su uso en 2010?. La vicerrectora contó que: “Habían puesto mal los números de serie, y en realidad no tendrían que haber estado acá, (el instituto) sino, mediante una donación por parte de la Jefatura de Policía hacia el instituto. Por eso Renar las secuestró y no hubo voluntad política nacional de hacer la devolución de ellas. No estaban los trámites como correspondían, dado que el instituto pertenece al Ministerio de Educación, entonces tenía que mediar una entrega formal por parte de la jefatura para que nos la pasaran a nosotros”, contó.
Para lograr la apertura de la sala, y retornar a la Policía sus reliquias, Magni Oga, el rector del Instituto Superior de Seguridad, envió una carta a Natalia Gambaro, directora nacional del Renar. En el escrito, donde nombra el aval de Amitrano, pide que se levante la medida de secuestro preventivo de los fusiles y demás materiales. En el texto fundamenta que “desde el año 1968 los fusiles Mauser han sido utilizados como material didáctico y decorativo, constituyéndose en un distintivo altamente apreciado por el pueblo puntano en general, debido a la destreza de cadetes en su paso marcial en desfiles, actos patrios, paradas policiales, guardias de honor y carrusel al servicio de la comunidad”. Lo que también escribió el rector, es que el armamento llegó en 1944 a la Policía de San Luis, que había sido creada en 1858, según data un boletín de la época. En los 60' los comenzaron a usar los cadetes de la Pringles. En la carta queda manifestado que recuperarlos era además de necesario, una responsabilidad por formar parte de la historia institucional. “Es necesario según el pensamiento de los hombres y mujeres de azul y sanluiseños rescatar nuestro acervo cultural tradicional, nuestro sentimiento folklórico, amparándonos en la tradición mantenida durante más de medio siglo utilizado con orgullo el fusil Mauser 1909”, detalló orgulloso.
El pedido surtió efecto el martes, cuando los efectivos del instituto, en conjunto con el director de la Agencia Nacional de Materiales Controlados, Hugo Murgo y el subcomisario Luis Antonio Biaggio rompieron los precintos que durante más de seis años guardaron tanta historia.
Más Noticias