“Lo tenía hace un año, se lo regaló su hermano mayor. Lo lleva a cumpleaños, vuelve manchado de comida y se baña con él. Por alguna razón inexplicable es su juguete preferido”, así define Ana María, la mamá de Fausto, a la relación que tiene su hijo con “Coco”, su burrito de peluche. El martes al mediodía, el nene de 6 años vio por última vez a su peludo y remendado amigo en un colectivo de la empresa Sol Bus que los llevó desde el hospital de San Luis hasta la Plaza de los Niños en La Punta y continuaba hasta el barrio 900 Viviendas, desde entonces, sólo piensa en recuperarlo.
Desde hace unos días Fausto acompaña a su mamá al Hospital por la mañana. “Suele llevarse un globo o algo para no aburrirse, pero le dije que a “Coco” no lo llevara, ayer lo hizo y no le dije nada. Cuando volvimos me dijo: Es culpa tuya por dejarme llevarlo”, cuenta Ana María, que para mitigar la pena de su niño le prometió que le comprará otro. “No tengo idea dónde voy a conseguir un burro de peluche, si fuera un oso…”, se lamentó Ana María.
En un grupo de whatsapp que tiene con sus amigas, comentó de la pérdida y de a poco comenzó a hacerse viral. El portal San Luis Informa, de La Punta, fue el primero en replicarlo y muchos se solidarizaron.
Fausto va a segundo grado de la escuela Rosenda Quiroga de la Ciudad de La Punta, en el turno tarde. Por cualquier información sobre “Coco”, comunicarse con el teléfono 2664164517. En la casa lo espera Fausto y el cajón de frutas restaurado que él mismo le acondicionó como cama.
Más Noticias