La honestidad brutal o la mentira piadosa

Siempre la honestidad brutal sacude más que una mentira piadosa. Aunque sea para salir del paso. Al menos eso consideró John Rogers, quien fue uno de los escritores de la película “Catwoman", protagonizada por Halle Berry en 2004. El autor calificó la película como “una mierda" y detalló algunas de sus experiencias con ella.

“Como uno de los escritores acreditados en Catwoman creo que tengo la autoridad para decirlo, porque fue una película de mierda arrojada por el estudio al final de un ciclo de estilo, y no tenía relevancia cultural, ya sea en la parte delantera o detrás de la cámara. Esta es una mala toma. Sentí vergüenza", respondió ante las indagaciones que le hacían a Michelle Obama, quien opinó que “Pantera Negra" debe ser el estandarte de las personas de color. Esa suerte no corrió con la mujer gato.

Es difícil realizar un trabajo y reconocer que no vio el filme de un tirón y haber faltado al estreno. Antes de aprobar el borrador final, el escritor fue echado por criticar la calidad del material. Y al final tenía razón. La cinta sólo recaudó 82 millones de dólares y costó 100 millones. Por un problema de derechos, no pudieron utilizar al personaje de Selina Kyle, aparecido en “Batman Regresa", y se le dotó de otro alter ego. Pero esta no es la excepción de la regla. Ni la primera ni la última.

La empresa de juguetes Mattel estaba a pique por la falta de venta de Barbies y He-Mans cuando los ochentas se estaban apagando. Filmó una película sobre los Amos del Universo protagonizada por Dolph Lundgren, con la intención de reinstalar en el mercado al héroe musculoso. La falta de financiación y la queja de los actores que no cobraban a tiempo, finalizaron con una obra mala y que poco se asemeja al héroe de los dibujos de Filmation.

Oley Sassone fue el responsable de la versión de “Los Cuatro Fantásticos” de 1994. Un filme realizado sólo con la intención de mantener los derechos sobre los personajes. La película sólo se consiguió en video y fue tan mala que Marvel no permitió que llegara a los cines para no arruinar la reputación de la primera familia superheroica.

Esto se repitió en 2015, con una nueva reversión moderna realizada por Fox, tras publicar dos películas con escasa aprobación del público. El fracaso en taquilla hizo dudar una continuación. Ahora, Marvel compró la empresa y puede volver a darle vida a su propia creación.

Para enumerar unas cuantas se puede rankear a “Batman y Robin", “Capitán América" (de 1990), “Spawn" o la primera de “Punisher". Cada una marcó un momento, para mal. ¿Entraría la Hulk de Ang Lee? Posiblemente sí. Se salva sólo por su arte y narración impecable digna de un cómic. Su argumento es paupérrimo y el villano no es digno de calzar ese zapato. En esos casos, ninguno fue capaz de pronunciarse sobre sus creaciones. Eso sí, el Fandom tiene bien presente esas lastimosas obras.