En la provincia hay un internado al mes por mordeduras de perros

Es muy frecuente caminar por los barrios y encontrarse con perros deambulando, y en muchos casos no es necesario irse del centro para dar con esa imagen. En la provincia hay muchos canes en la calle. A eso hay que sumarle una mala educación sobre cómo es una tenencia responsable y el maltrato por parte de dueños, o aquellos que lo fueron. Todo genera un clima propicio para que los animales tengan una actitud agresiva. En San Luis hay un promedio de una internación mensual de personas por mordeduras de perros.

El Programa Epidemiología y Bioestadísticas del Ministerio de Salud reveló que durante 2017 se registraron trece hospitalizados de toda la provincia, debido a las mordeduras. Es decir que son casos graves que requirieron que la persona quede internada.

"A mí me preocupa realmente la mordedura de perro, porque  sobre todo en el interior, y también en la capital, hay mucho perro suelto en la vía pública, que se juntan entre varios, arman jaurías, rompen las bolsas de basura, y pueden producir accidentes", aseguró Rodrigo Verdugo, jefe de Epidemiología.

Más del 70% de los casos se registraron, lógicamente, en los departamentos con mayor cantidad de habitantes: Pueyrredón y Pedernera, se llevaron diez de las trece internaciones. Las otras tres se dieron en Chacabuco, Pringles, y en uno que no se especificó. "También hay que tener en cuenta que tal vez la persona viajó de un departamento a otro, para hacerse atender en un hospital más grande", aportó Verdugo, en relación a esa preponderancia de Pueyrredón y Pedernera en la estadística.

Otro dato interesante que arroja el informe de Epidemiología es el lugar donde se produjo la mordedura. Si bien un caso no fue determinado, el resto se dio por igual cantidad tanto en la vía pública como en domicilios. Es un dato que puede sorprender a los que piensan que el problema está en los perros de la calle, pero la realidad es que en muchos casos, los problemas empiezan en casa, con una tenencia y un cuidado irresponsable por parte de las personas, que terminan formando una actitud negativa en el animal, según aseguran los especialistas.

Lo positivo de las cifras, es que la comparación interanual da que en 2017 hubo un 35% menos de internaciones. Si bien es algo para destacar, para el Ministerio de Salud sigue siendo una preocupación y es algo a lo que le están poniendo el foco, aunque aseguran que es un trabajo en conjunto a realizar con las comunas, que tienen la gestión de lo que pasa con los canes dentro de su ejido municipal.

"Hay que trabajar mucho en la esterilización canina, que es responsabilidad de los municipios, y el control por parte de los dueños, para que el perro no esté suelto. Yo creo que hay mucho por hacer. Los municipios tienen que reglamentar y hacer cumplir las normas. El Ministerio de Salud trabaja con ellos, sobre todo en la campaña de vacunación antirrábica, porque sabemos que más allá de que si el accidente es grave o no, la transmisión de la rabia puede darse por una mordida superficial también, con la saliva del animal. Córdoba ha tenido casos de rabia, entonces trabajamos mucho en la campaña, distribuimos vacunas a los municipios, para que ellos las apliquen".

El 22 de marzo pasado, en Río Cuarto, ciudad de la provincia vecina, se registraron dos positivos del virus, en un perro y un murciélago. El funcionario del Ministerio de Salud asegura que esos hechos, "encendieron la alarma", y por eso se proyecta el lanzamiento de una gran campaña antirrábica en la provincia.

El grupo etario más propenso

El informe publicado por Epidemiología también discrimina los hospitalizados por los distintos grupos etarios. Durante 2017, los más afectados fueron los niños, adolescentes y jóvenes de entre los 10 y los 19 años, que requirieron internación en cinco oportunidades. Seguido están los comprendidos entre los recién nacidos y los 9 años, y completan el podio los que tienen entre 60 y 69 años.

"El grupo etario es de destacar, porque son mucho más mordidos los niños que los adultos. Esto se debe a que están a la misma altura o muy cerca de la cabeza del perro. Entonces son los que más expuestos están", indicó Verdugo, y agregó que también los hombres tuvieron más internaciones por mordeduras que las mujeres (diez casos contra tres), debido a que les gusta más jugar en el exterior, y son más arriesgados para jugar con los perros, según opinó.

Casos recientes

Si bien el Ministerio de Salud no proporciona cifras oficiales de este año, ya se saben algunas que resonaron en los distintos portales  locales.

Hace una semana, en Santa Rosa del Conlara, Juan Escuero, un comerciante de Villa de Merlo, recibió más de 100 puntos de sutura, tras sufrir un salvaje ataque de dos perros en la vía pública. Según relató el damnificado, caminaba por la ruta provincial N° 5, cuando los perros sorpresivamente empezaron a atacarlo. Recibió mordidas en la cabeza, el cuello, espalda, piernas, y brazos. Cuando ya estaba indefenso, un vecino apareció y pudo ahuyentar a los canes, que eran cruzas de dogos argentinos.

También en San Francisco del Monte de Oro, el martes pasado, un pitbull con dueño, pero que andaba suelto en la calle, atacó a Ricardo, un vecino del barrio Luis Zupancic, quien fue atendido por una fuerte mordedura en su pierna izquierda en el centro de salud de la localidad, donde le dieron antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios.