La Selección Argentina Sub 17 aplastó a Polonia y clasificó a los octavos de final

Por Sofía Jaimez Bertazzo 

La Selección quedó primera en el Grupo C y espera el mejor te los terceros del B, E o F. El proceso de la Sub 17 fue de menos a más: arrancaron con una derrota por 2 a 1 frente a Senegal; se acomodaron con una buena victoria por 3 a 1 ante Japón; para el último partido de la primera etapa salieron con los tapones de punta y vapulearon 4 a 0 a Polonia. Los goles fueron de Laplace, Ruberto quien ha convertido en todos los partidos, Subiabre y finalmente López.

La selección europea llegó al mundial muy afectada, con cuatro jugadores menos, que fueron suspendidos por llegar alcoholizados a la concentración. Con lo cual no tuvieron demasiado recambio y la exigencia para ellos fue mayor.

Si bien el grupo era complejo y el panorama inicial no fue bueno, los jóvenes supieron sacar adelante al equipo y dejar la camiseta argentina bien posicionada. “El objetivos es salir campeones" afirmó Claudio “El Diablito” Echeverri y agregó: “Hicimos un gran partido todo el grupo, hacía mucho calor dentro de la cancha, pero contentos”.

El enfrentamiento fue en el hermoso Estadio Internacional de la ciudad de Jakarta, capital de Indonesia. La infraestructura de esta sede es de primer nivel, ya que fue inaugurada en 2022. La única falla es el campo de juego que con el pasar de los partidos cada vez está más picado. Incluso le faltó riego según comentó Echeverri con El Diario de la República.

El encuentro fue intenso, y la Selección desplegó su juego al frente e intentó convertir desde todos los sectores del campo de juego, así se logró esta victoria, que podría haber regalado incluso más goles.12 fueron los tiros a la meta, sobre 6 de Polonia, que también pasaron muy cerca.

De acuerdo al análisis que aportó Diego Placente, el plantel está con más personalidad y se sacó los nervios. “Lo importante es que jugaron casi todos y eso potencia al equipo en adelante. Sabíamos que ellos iban a arriesgar mucho, por eso no estábamos cómodos con la pelota, más el calor y la cancha que no estaba tan buena, pero sabíamos que ellos estaban mano a mano atrás. Entonces teníamos que hacer un gol y tranquilizarnos”.

La banda de capitán rotó por tres brazos diferentes: primero el número 10, luego el 9 y finalmente el 2. Lo que demostró el recambio y los minutos que otorgó el DT a cada jugador para generar confianza en sí mismos, en el grupo y también para preservar la capacidad física del plantel sin sobreexigencias. Ian Subiabre fue elegido como el jugador del partido, por convertir el tercer gol y por asistir en muchas oportunidades, fue uno de los jugadores más completos del encuentro. “Es la primera vez que me toca y estoy muy feliz”, dijo con una sonrisa en el rostro; “me siento muy bien con mis compañeros y con el cuerpo técnico”.