Tenía una orden de restricción, la golpeó y terminó condenado

A pesar de que M.C. tenía una orden de restricción en contra de su expareja, el 6 de enero de este año viajó desde Tilisarao a Villa Mercedes para convencerla de retomar la relación y cuatro días después la amenazó y la golpeó. Por esa seguidilla de hechos, el hombre, de 49 años, fue condenado este miércoles a dos años de prisión en suspenso.

Para mantener la condicionalidad de la pena, deberá someterse a diversas pautas de conducta, entre ellas, evitar todo contacto con su expareja y realizar tratamiento psicológico a fin de modificar las actitudes que lo aparten del cumplimiento de las normas.

En su teoría del caso, la fiscal Débora Antonella Roy Gitto relató que el 6 de enero M.C. viajó a Villa Mercedes con el objetivo de convencer a su expareja de retomar la relación. La joven accedió, y retornó junto con la hija de ambos a la casa del hombre, en Tilisarao. Cuatro días después, el 10 de enero alrededor de las 14, la pareja discutió a raíz de los celos del hombre. El episodio terminó con amenazas y agresiones hacia ella.

Roy Gitto continuó con el relato y detalló que ese mismo día, alrededor de las 22, salieron los tres a bordo de la camioneta del imputado. Él detuvo el vehículo en cercanías a la Terminal de Tilisarao y allí comenzó una nueva discusión, le quitó la bebé de los brazos y comenzó a golpear a la joven. Luego, la tomó del cuello e intentó ahorcarla.

La mujer comenzó a patear el parabrisas con ambos pies hasta romperlo y allí M.C. la soltó. Tras lograr salir del vehículo, la víctima llamó a su madre para contarle lo sucedido y le pidió que diera aviso a la Policía. Luego de reiterados pedidos M.C. le entregó la bebé y, finalmente se fue caminando hasta la terminal donde fue auxiliada por la Policía.

M.C. asumió todos los delitos que le imputó la fiscal Roy Gitto, reconoció su autoría y aceptó la imposición de la pena en suspenso. El ahora condenado fue defendido por Francisco Muñoz y Mario Aimale, quienes no se opusieron al acuerdo. Por su parte, la víctima participó de la audiencia de forma online, y prestó conformidad al acuerdo presentado.

Este miércoles, la jueza de la Sala Penal de la Tercera Circunscripción Judicial, María Claudia Uccello, dictó el veredicto condenatorio por el delito de incumplimiento a una orden judicial y lesiones leves agravadas por ser cometidas en contexto de violencia de género.