Risas que curan: se graduaron otros diecinueve payamédicos

Pelucas de todos colores, zapatillas de tonos flúor, muchas ganas de aliviar penas y levantar ánimo son las principales herramientas que mostraron las 19 personas que se convirtieron en los nuevos payamédicos que tiene San Luis. Después de capacitarse y ensayar durante el último semestre, obtuvieron el diploma que les permitirá recorrer los hospitales provinciales y visitar a los pacientes para llevarles un rato de alegría.

El acto de graduación se realizó en el salón multiuso del gremio UPCN, el espacio donde tomaron sus capacitaciones. Familiares y amigos acompañaron a los nuevos payamédicos al momento de recibir sus diplomas. Además de alegrías, bromas y buen humor, también hubo emociones.

Los flamantes "doctores" son: Agustina Romero, Alejandra Martín, Ana Rodríguez, Ethel Zavala, Graciela Llaurado, Horacio Orona, Hugo Cerizola, Irina Volkova, Ivana Blanco, Jessica Valles, Julieta Altamirano, Laura Ortiz, Marianella Aballay, Marta Osella, Martín Figaro, Micaela Ambrosio, Silvia Moyano, Sofía López y Virginia Mariojouls.

En agosto, el grupo superó una capacitación que estuvo a cargo de José Pellucchi, el titular de Payamédicos Argentina, quien explicó aspectos relacionados al clown (NdeR: técnica teatral, el método de actuar de un payaso trasladado al universo del actor) y a ítems vinculados a la bioseguridad al momento de trabajar en los hospitales.

Los egresados ya comenzaron a participar de las visitas al Hospital San Luis y comprobaron cómo ayuda su asistencia a pacientes mayores de edad y pequeños internados en el área de pediatría.  

"Estamos muy felices porque egresa una nueva tanda de payamédicos que comenzarán a asistir a pacientes de nuestra provincia.  Son casi veinte graduados que cumplieron con el curso y con una capacitación intensiva que se dictó en agosto y que tuvo como ejes centrales la payamedicina, la bioseguridad y los cuidados a tener en el hospital", expresó Celina Pardo, una de las responsables de Payamédicos San Luis.

Pardo explicó cómo funciona el servicio que brindan los payasos que alivian el alma de aquellas personas con problemas de salud.

"En el hospital tenemos un proceso, pasos a seguir antes de ver a los pacientes. Analizamos con qué nos vamos a encontrar previo a encontrarnos con esa persona. Si bien es una situación que no se planifica, sí sabemos qué enfermedad tiene antes de ingresar a visitarlo",  precisó. 

Más tarde reveló números de esa actividad en la provincia y el alcance que tiene un servicio que ayuda a recuperar el ánimo de aquél que padece una dolencia.

"Actualmente somos cuarenta payamédicos en San Luis, pero nos hace falta más gente para llegar a más centros médicos y a asilos. Es lo que nosotros anhelamos", sostuvo.  

Antes de pasar a recibir sus diplomas, desde los parlantes se escuchó uno de los preceptos de ser payamédico. Y la frase es pura precisión: "Es una experiencia transformadora, una pasión que llena el alma".

En los abrazos entre docentes y los flamantes "doctores" quedó reflejada esa vocación de ayudar a sonreír a la gente y a hacerlos olvidar de sus males por un rato.