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Orgullo: una puntana que asombra al mundo

Por redacción
| 22 de octubre de 2014
En familia. Gabriela junto a su esposo Michael y su hija Amapola. En San Luis viven sus padres y hermanos.

—¿Cuál es tu nombre y tu profesión?

 

Este reportaje exclusivo fue publicado en La Opinión y La Voz del Sud.


Mi nombre es María Gabriela Páez Segalá.

 



—¿Estás radicada en Estados Unidos? ¿Desde hace cuánto tiempo?

 


Sí, estoy radicada en Estados Unidos, desde hace 9 años (Mayo del  2005).

 



—¿Cómo está conformada tu familia?

 


 Mi familia está conformada por mi padre José Ventura Páez, excelente bioquímico en San Luis y la persona que me motivó a seguir en esta fantástica carrera científica, mi madre Cecilia Segalá de Páez, una admirable y muy talentosa artista, cuyos conocimientos en arte siempre me han inspirado desde pequeña y mis ingeniosos hermanos Cecilia Esther (oficial de segunda en una fiscalía del Poder Judicial), José Sebastián (subsecretario de Coordinación de Políticas Sociales) y mi hermanito Ángel Rodrigo.

 


Acá en Estados Unidos armé una nueva familia en 2008, compuesta por Michael Reddy, mi esposo, otro talentoso y admirado bioquímico, cuyo cargo es “program director” o director de programas en National Institute  of Health (Instituto Nacional de Salud) y mi hijita Amapola Cecilia, que sólo tiene 9 meses y ya es más inteligente que su madre (dice con orgullo).

 


Una persona que siempre fue de gran influencia moral en mi carrera de bioquímica en San Luis y que me ayudó a llegar a este país, no sólo en forma intelectual, también económica, y que nunca dejaré de agradecer; es la profesora Liliana Oliveros.

 



—¿Dónde hiciste la escuela primaria, dónde la secundaria y dónde tus estudios superiores?

 


La escuela primaria y secundaria la hice en el Instituto Santo Tomás de Aquino, me recibí de licenciada en Bioquímica en la Universidad Nacional de San Luis, y después obtuve un master de Ciencias en Química y Bioquímica en la Universidad de Milwaukee, Wisconsin, Estados Unidos.

 



—¿Qué áreas de interés te motivan de cara al futuro?

 


Áreas relacionadas con la ciencia, cualquier rama asociada con la naturaleza, especialmente la biología de evolución aplicada para ser pasada a mentes jóvenes. Una buena educación en mentes jóvenes es crucial para generar un futuro mejor con mentes sanas y conscientes.

 



—¿Cómo puede ayudar el desarrollo de la ciencia y la tecnología a la obtención de una sociedad más justa e incluida?

 


Es la educación (y nunca me voy a cansar de decirlo) de los niños y jóvenes, con buenos programas de ciencias, la que debe crear una sociedad justa e incluida, sin lugar a dudas. Es una reacción en cadena, buenos profesores, con buenos programas crean buenos alumnos.

 


Una mejor educación en ciencias para nuestros hijos puede significar mejoras para la sociedad. Ayudando a estudiantes a convertirse en ciudadanos más responsables que puedan construir una economía fuerte, contribuir a un entorno más saludable y lograr un futuro brillante para todos. Una buena ciencia ayuda a la educación “para desarrollar la comprensión y hábitos mentales que necesitan para convertirse en seres humanos apasionados capaces de pensar por sí mismos y para afrontar la vida”. En la enseñanza debería estar incluida la posibilidad de un pensamiento colectivo con sus ciudadanos compatriotas, en construir y proteger una sociedad abierta, decente y vital. Mientras más ciencia estudian los chicos, más son alfabetizados, creando una sociedad más fuerte.

 



Ciudadanos más responsables

 


Los estudiantes que han aprendido a pensar de manera crítica y tener una saludable dosis de escepticismo puede tomar mejor sus propias decisiones, he allí votantes más inteligentes y consumidores más fuertes. Además, el sentido de la responsabilidad y la prudencia que la ciencia ofrece, junto con la comprensión de cómo funcionan las cosas (ya se trate de las reacciones químicas, el desarrollo humano, o las necesidades nutricionales), puede ayudar a los futuros padres para proporcionar un ambiente seguro y saludable para sus propios hijos y ser vecinos y dueños de mascotas más responsables.

 

 



Construcción de una economía fuerte

 


La comunicación, la investigación, la información y colaboración que ofrece la ciencia, puede producir una generación de individuos que están mejor preparados para cualquier carrera y pueden hacer mayores contribuciones a la sociedad. Además, los estudiantes que tienen una base sólida de conocimientos en la ciencia, más adelante serán más abiertos a las nuevas tecnologías e ideas que pueden impulsar las empresas y estimular la economía.

 



Contribución a la salud mundial

 


Los logros científicos han dado lugar a vidas mejores, más largas y saludables. Una generación que entiende y honra o celebra los logros pasados, ​​dará la bienvenida y asfaltará el camino para los descubrimientos e inventos futuros que mejorarán la salud física y mental. Y una sociedad más sana significa una sociedad más productiva.

 


Contribución a decisiones informadas que afectan el mundo

 


Al enfatizar y explicar la dependencia de los seres vivos entre sí y en el medio ambiente, la ciencia fomenta el tipo de respeto por la naturaleza que pueden informar las decisiones sobre los usos de la tecnología para mejorar el mundo de los seres humanos y todos los seres vivos.

 



Asegurar el apoyo a futuro de los avances en investigación científica

 


Una sociedad consciente de los beneficios de la ciencia y la tecnología trabajará para asegurarse de que siga siendo científicamente y tecnológicamente competitiva. Además, una sociedad alfabetizada proporcionará el apoyo necesario, la financiación y la promoción para asegurar que las futuras generaciones sigan mejorando en los avances modernos que beneficien a todos.

 



—¿Cómo imaginás el mundo de aquí a 20 años?

 


En la parte científica, tengo dos caras. Una brillante en donde la gente ha creado inmensos avances tecnológicos como viajes a Marte, curas de cáncer, más descubrimientos de vacunas, mejores sistemas de transporte, mejor uso de combustible para el medio ambiente, mentes más brillantes y concientizadas que encuentren la forma de reciclar los desechos humanos y transformarlos en energía de consumo, mejores formas de crear energía solar o hidroeléctrica, más conciencia por el calentamiento global y los desperdicios humanos. Especialmente una mentalidad en donde se considere más la superpoblación. Y mejores formas de crear y almacenar agua para el consumo. La segunda cara es oscura, donde el mundo se empeora en cada uno de los puntos destacados anteriormente y aumentan las guerras por la lucha desesperada por la subsistencia, espacio, pero especialmente por el agua.

 



—¿Es muy grande la brecha de desarrollo científico entre los principales países en la materia (EE.UU, Gran Bretaña, Alemania, Francia y Japón, por ejemplo) y el resto del mundo?

 


Las mentes brillantes están en TODOS LADOS, como también las no tan brillantes, la diferencia es simplemente el apoyo económico y las riquezas que cada país tiene. Donde se puede avanzar a pasos agigantados o a pasos de tortuga.

 



—¿Qué significa tener una relación de cercanía con el Premio Nobel de Química, Eric Betzig?, ¿podrías destacar algún aspecto puntual de su trabajo?

 


Es un honor muy grande. Eric (y menciono a Harald también) y todo el grupo de trabajo son personas súper modestas, excelentes seres humanos y extremadamente inteligentes, crean un ambiente de trabajo muy sano y motivado. Lo primero que me mencionaron cuando empecé a trabajar en Janelia, él y su equipo, fue cómo crearon esta microscopía de súper-resolución. Cada día me siento muy orgullosa de haber tenido la oportunidad de trabajar en uno de los lugares más importantes a nivel científico, donde los avances ocurren a pasos agigantados porque hay mucho dinero que se mueve sólo para este fin: el avance en ciencia y tecnología. Eric y Harlad desarrollaron un microscopio que permite a los biólogos asomarse en el interior las células. Han abierto la puerta para mirar la organización y la dinámica de los conjuntos de proteínas dentro de estructuras y membranas celulares y permite la cuantificación de las correlaciones espaciales de las proteínas dentro de tales estructuras. Como tal, es muy prometedora para la microscopía, con una resolución sin precedentes.

 



—¿Dónde te imaginás trabajando de aquí a 10 años?

 


Me imagino todavía radicada en Estados Unidos (¡perdón Pa!). Estar acá es duro por el hecho de estar tan lejos de mi propia familia, mis amistades y mis raíces, pero hoy en día tengo una familia aquí y un buen trabajo donde puedo ejercer mi carrera felizmente. Estar feliz es un punto muy importante en la vida y hace que el entorno sea mejor, especialmente para mis padres.

 



—¿Disponés de tiempo libre?, ¿Qué actividad preferís hacer en esos momentos?

 


Siempre hay tiempo para hacer otras actividades, pienso que es muy importante para una mejor salud mental y si no lo hubiera, me lo crearía de alguna forma. En mi tiempo libre me dedico a mi esposo y a mi hija de 8 meses y medio, ella está en la etapa de crecimiento rápido y no me quiero perder ni un momento. Gracias a mi padre me gusta mucho jugar al tenis, también salir a correr, andar en bicicleta, tocar la guitarra, pero principalmente (adquirido por mi madre) me apasiona el arte y es por eso que me gusta aplicar el arte en la ciencia o la llamada “ilustración científica”, con ilustraciones se enseña y se aprende mucho. Me gusta hacer ilustraciones de cualquier cosa relacionada con la naturaleza.

 


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