La Policía detuvo a cinco chicos por robos y destrozos en la calle

El menor tiene 11 años y el mayor 15, pero su edad no les impidió delinquir como lo haría un mayor de edad. Anteayer, la Policía demoró a cinco menores en distintos hechos ocurridos en la capital puntana y en Villa Mercedes. El motivo de las aprehensiones van desde arrebatar un celular en la calle hasta arrancar la reja de una ventana para entrar a robar a una vivienda.
El jueves a la tarde, policías de las Comisarías 1ª y 2ª de la capital se alborotaron tras un aviso de chicos armados en el centro. “Todo surgió con un llamado que recibí en mi teléfono. Me decían que tres varones iban corriendo por calle Pedernera y que dos de ellos iban armados. Le pregunté a esta persona si estaba seguro y me dijo que sí”, relató el segundo jefe de la Comisaría 1ª, subcomisario Roberto Molina.
El policía se comunicó con el 911 y coordinó un operativo para dar con los sospechosos. “Hablé con el Centro de Operaciones y con el personal de la Comisaría 2ª. Trabajaron cuatro móviles para interceptarlos”, contó.
Los chicos, que resultaron tener 11, 13 y 14 años, subieron por Pedernera hasta Sucre. Luego doblaron hacia el norte y después al este por calle Juan W. Gez. “Fueron interceptados en inmediaciones de la Plaza del Carmen”, refirió la fuente, pero “cuando los agarramos no les encontramos nada. El testigo nos volvió a asegurar que dos portaban armas de fuego, así que suponemos que las han descartado en el camino”.
Los efectivos rastrillaron el trayecto que hicieron los chicos pero no hallaron nada. Igual tenían sospechas de que por algo escapaban, así que “empezamos a averiguar en los comercios de la zona a ver si alguno había sido víctima de algún ilícito. Ahí nos topamos con la novedad de un vehículo dañado”, relató el subcomisario. Casi en la esquina de Hipólito Yrigoyen y Junín había un auto estacionado con el vidrio roto. No faltaba nada del interior, pero la policía sospecha que era la intención de los jóvenes llevarse algo.
Los tres fueron trasladados a la Comisaría del Menor y luego restituidos a sus progenitores. Según informaron desde esa seccional, los sospechosos negaron haber estado armados, y como no hubo denuncia del dueño del auto dañado, “caratulamos su ingreso como situación de calle”, contó la inspector Villegas. No obstante, la policía dijo que al menos uno de ellos ha tenido varias entradas a la comisaría por otros hechos

En Mercedes también
El de San Luis no fue el único hecho que involucró a menores. En Villa Mercedes, a plena luz del día, un grupo de cuatro chicos robó en dos domicilios de la zona sur de la ciudad. “A las 14:20 unos vecinos llamaron al 911 dando cuenta de que unos menores habían cometido unos ilícitos y que caminaban por calle Tucumán en dirección al barrio 960 Viviendas”, relató el segundo jefe de la Unidad Regional II, comisario Gustavo Ortiz.
Un móvil interceptó al grupo antes de que llegara a la barriada, “pero se escabulleron y lograron atrapar sólo a uno, que resultó tener 12 años”, contó el policía.
Los pesquisas buscaron un poco en la zona y pudieron recuperar el botín, que era “un televisor LCD marca Phillip de 32 pulgadas, un par de zapatillas blancas marca Olympikus, un caloventor y otros elementos menores”, describió Ortiz.
Luego establecieron que las cosas habían sido robadas de dos domicilios, uno en calle Tucumán 1163, propiedad de Néstor Orlando Sallenave, y otro en Granaderos Puntanos 483, donde vive Corina Villegas. “En la primera casa doblaron a la mitad una puerta de chapa que da al norte. En la segunda arrancaron la reja de una ventana que da al patio trasero de la vivienda”.
El precoz ladrón fue trasladado a la Comisaría del Menor, y según refirió Ortiz, pese a su corta edad ya es conocido en el ambiente policial por “delitos menores”.
Más tarde, en el centro mercedino, una mujer de 63 años y su nieta de 15 pasaron un mal momento cuando un adolescente de 15 años les robó el celular. Según relató Susana Ramona Domínguez en la comisaría, caminaba por calle Balcarce y Rivadavia junto a su nieta cuando un joven las abordó y arrebató el teléfono a la joven, que llevaba el aparato en la mano.
“Se dio a la fuga por Balcarce en contramano, pero personal del Comando Radioeléctrico lo interceptó a pocas cuadras, en la esquina con Riobamba”, contó Ortiz. Cuando los efectivos supieron su edad le dieron intervención a la Comisaría del Menor. “La jueza ordenó la entrega de los elementos de la causa y la restitución del joven a sus progenitores. No alcanzamos a mandar los papeles que este chico ya estaba en la calle”, se quejó el policía.