Ellas pagan y ellos no: cuando el fútbol no iguala

Tras la nota publicada en la Mesa 5, donde las mujeres pelean desde un lugar muy desigual en el fútbol puntano para tener la misma paridad que los hombres, buscamos entender un poco más sobre los porqué de esta situación.

El informe hacía notar que en los principales clubes de San Luis está el ejemplo de lo que sucede. En Juventud, las chicas tienen que abonar mensualmente 200 pesos, más una inscripción anual de $500 a la Liga Sanluiseña. En el “Verde” la situación es similar, con un abono mensual de 300 pesos.

Si bien algo semejante sucede en el resto de los deportes (hockey, vóley y básquet, por citar ejemplos, y en todas las categorías infanto-juveniles), en el caso del fútbol no. En primera división de caballeros, los clubes pagan todo, incluso algunos clubes le abonan a futbolistas de la competencia local. Y no pasa lo mismo con esos mismos clubes en los torneos femeninos.

Consultado Fernando Aguilera, nuevo presidente de la Liga Sanluiseña de Fútbol, dijo que “es algo interno, y depende de los clubes cómo manejarlo”.

La Liga programa los partidos, orienta la actividad, pero la decisión de cómo manejarse es de cada institución. En cuanto a los aranceles, cada club del fútbol femenino le aporta a la Liga 500 pesos, la misma cantidad de dinero que el fútbol masculino.

Después, es menor el gasto que tiene el torneo de las chicas, en cuanto al arbitraje y seguridad, partiendo de la base que las mujeres, al igual que sucede con el fútbol infantil, juegan sin seguridad policial.

En cuanto al arbitraje, son 600 pesos por partido: las mujeres deciden compartir gastos y pagan 300 pesos cada equipo. Además, son 250 pesos de paramédico, por juego. Si tenemos dos partidos por cancha, sería un gasto total de 1.700 pesos, que pagan las damas dividiendo 850 pesos cada equipo.

El torneo oficial de los hombres tiene un costo fijo de 2.600 pesos de arbitraje, para dos partidos (Reserva y Primera), más 2.600 pesos de operativo policial, y 500 pesos de paramédico.

Al club local (en la competencia de hombres no se reparten gastos, todo lo absorbe el dueño de casa) abrir la cancha tiene un costo de 5.700 pesos.

Desde las instituciones, coinciden en que “el cambio se irá dando paulatinamente”. Y resaltan que “lo importante es la integración, sumar el fútbol femenino al club y acompañar ese crecimiento”.

Sin embargo, y conociendo estos valores, la pregunta que nos hacemos es: si cada club absorbe el suculento gasto de 5.700 pesos para abrir la cancha cada vez que es local, ¿por qué no sucede lo mismo con las mujeres, que requieren solo de 1.700 pesos y lo pagan ellas?