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Doce años de prisión por traficar casi 3 toneladas de droga

Sergio "Checho" Nuarte Morales fue descubierto cuando transportaba 2.664 kilos de marihuana, que provenían de Paraguay y tenían como destino Cuyo y Chile. Dos cómplices más fueron condenados a ocho años de prisión. 

Por redacción
| 14 de febrero de 2019
Foto: Martín Gómez

Aunque le haya pedido a los integrantes del Tribunal Oral Federal (TOF) de San Luis que fueran benévolos con él, Sergio Darío "Checho" Nuarte Morales fue condenado ayer a 12 años de cárcel, como organizador del transporte del mayor cargamento de droga secuestrado por una investigación iniciada en San Luis. Eran 2.664 kilos de marihuana, que provenían del norte del país y tenían como destino Cuyo y Chile, y fueron interceptados el 11 de febrero de 2017 en la localidad cordobesa de Saturnino Laspiur. Los argumentos del defensor de Nuarte Morales, que dijo que los investigadores pretendieron hacer quedar a su cliente "como un 'Chapo' Guzmán", no hallaron eco en el tribunal, que lo consideró autor del mismo delito por el que la fiscal subrogante, Mónica Spagnuolo, lo había acusado y le aplicó la pena que ella había solicitado en su alegato.

 

Esta no es la primera condena que Nuarte Morales tiene por estupefacientes: en 2013, acordó mediante un juicio abreviado la pena a cuatro años y ocho meses de prisión, por almacenamiento de droga. En esa oportunidad, le hallaron sustancia en su casa de Juana Koslay.

 

Por eso, y por el hecho de que la carga de 2017 era cuantiosa —en la audiencia de ayer estimaron que su valor rondaba los 25 millones de pesos— era imposible que zafara de una nueva condena. 

 

Además, casi al inicio de la siesta, también recibieron castigo el formoseño Jaime Estanislao Núñez, quien fue el nexo entre Nuarte Morales y el proveedor; y Oscar Alfredo Zanón, el camionero de Villa Mercedes contratado para traer los panes. Fueron condenados a ocho años de cárcel, como coautores de transporte de estupefacientes, agravado por intervenir en su comisión tres o más personas.

 

En su alegato, la representante del Ministerio Público Fiscal dijo que, en el caso de Zanón, fue un agravante el hecho de que haya implicado a su propio hijo, Néstor Javier Zanón, a quien llevaba de acompañante en su Ford Cargo con acoplado. El muchacho, que llegó al debate excarcelado, fue absuelto por el tribunal que preside Gretel Diamante y que completan los jueces Roberto Julio Naciff y Héctor Fabián Cortez.

 

Spagnuolo leyó algunas transcripciones de las escuchas telefónicas, que daban cuenta de la vinculación entre Nuarte Morales y personas conectadas a la venta de droga en el norte del país, y con Núñez y Zanón padre.

 

Prácticamente, en ninguno de los diálogos los sospechosos hablan de forma explícita del estupefaciente: este es mencionado como "los zapatos" o "los dólares", o "el kilómetro y medio", por ejemplo, lo que hace presumir que sabían que sus teléfonos podían estar "pinchados".

 

Previo al secuestro de la droga, gracias a las escuchas y a otras tareas de campo que llevó adelante la Policía Federal —bajo la dirección del fiscal federal de instrucción Cristian Rachid— establecieron que Nuarte Morales y Zanón iban a concretar el viaje al norte, y qué función iba a cumplir cada quién.

 

"La hipótesis de la Fiscalía es que trabajaron organizadamente en el transporte del estupefaciente. Nuarte Morales tenía el rol de organizador, por lo que la pena se agrava. Tenía vinculación con gente del norte del país que se dedica al tráfico de droga", como por ejemplo, un hombre de apellido Wagner que cumple prisión domiciliaria, dijo.

 

Por su parte, Zanón padre aportó el camión y ofició de conductor, y Núñez tenía los vínculos para conseguir el estupefaciente allá y salir de la zona, resumió. "En el caso de Zanón hijo, para mí, fue un partícipe secundario, por eso pedí una pena mucho menor, de tres años de prisión en suspenso", agregó.

 

"Acá hay que hacer una distinción: una organización no es lo mismo que una asociación ilícita —aclaró—. Esta última requiere una permanencia, en tanto que la organización puede ser por única vez. Pueden organizarse antes o al momento cometer el hecho. Aquí se sumó un agravante, el de la intervención de tres personas o más, que requiere que tal cantidad de sujetos trabajen mancomunadamente bajo un plan común, trazado de antemano, con funciones determinadas para lograr el fin, en este caso, el transporte de la sustancia", refirió la fiscal.

 

Tanto el defensor de Nuarte Morales, Aldo Giuliani, como el de Núñez, Marcos Juárez, y el de los Zanón, Jorge Sosa, discreparon con la fiscal en cuanto a la calificación que le impuso a cada uno y, por ende, con las penas que pidió.

 

Giuliani solicitó a los jueces que mutaran la calificación por la de transporte simple de estupefacientes y, subsidiariamente, a transporte agravado por el número de personas implicadas. Dijo que a Nuarte Morales no le cabía el rol de organizador y que era descabellado atribuírselo, entre otras razones, porque no disponía de 25 millones de pesos para financiar tal cantidad de sustancia.

 

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