SAN LUIS - Viernes 03 de Mayo de 2024

SAN LUIS - Viernes 03 de Mayo de 2024

EN VIVO

Fondos para que crezcan ovejeros y caprineros

Están contemplados en las leyes nacionales y dirigidos a productores individuales y personas jurídicas. Se usan para sumar genética, instalaciones o incrementar el rodeo.

Por Marcelo Dettoni
| 04 de octubre de 2020
Crecimiento. El plantel ovino de la provincia, con estímulos, está en desarrollo. Foto: Revista El Campo.

La pandemia y las dificultades económicas de la Argentina planteaban un escenario complicado para lograr el cumplimiento de las ayudas que establecen las leyes nacionales ovina y caprina, que están dirigidas a productores de todo el país y se gestionan a través de las Unidades Ejecutoras Provinciales (UEP). Estas son las encargadas de canalizar los proyectos, coordinar con los formuladores y los criadores que se inscribieron y, finalmente, elevarlos al Ministerio de Agricultura de la Nación, que es el que debe enviar los fondos.

 

“Realmente afrontamos un clima oscilante en todo sentido desde que comenzó el año. Entre los problemas logísticos que arrimó el coronavirus y la falta de contacto directo con las autoridades nacionales, el panorama no era el mejor. Pero el Programa Producción Agropecuaria y Arraigo Rural y la UEP arbitraron los mecanismos para que el desarrollo de los procesos sea lo más normal posible y que todos los que quisieran pudieran presentar sus proyectos ovinos y caprinos que sean evaluados en tiempo y forma”, reconoció Juan Manuel Celi Preti, quien preside la UEP en representación del Ministerio de Producción, que está integrada por los propios productores y organismos como el INTA, Senasa y Agricultura Familiar.

 

Ante la coyuntura tan distinta a la de años anteriores, San Luis diseñó para esta nueva modalidad "entre pandemia y  cuarentena" estrategias digitales para divulgar la información respecto a los requerimientos técnicos y formales de presentación de proyectos. En total, más de 70 consultas, todas vía mail, fueron canalizadas por el equipo de coordinación de la UEP en la provincia, que conduce Gabriela Delgado.

 

 

Caprinos. Los productores tienen menos fondos disponibles de Nación, pero San Luis los acompaña con sus planes sanitarios. Foto: Revista El Campo.

 

 

Los proyectos pasaron un primer filtro entre los miembros de la UEP que fueron los encargados de la evaluación técnica; en tanto la evaluación formal fue rigurosamente observada por el equipo de la coordinación. “Los proyectos fueron discutidos en su totalidad para llegar a la conclusión de cuáles podían ser aprobados y cuáles no, siempre de manera virtual. Después se llevaron los papeles a cada pueblo en los que viven los productores para que se firmaran los originales de los que siguieron adelante”, agregó Celi Preti.

 

El propio Celi Preti, acompañado por Delgado, protagonizó una jornada maratónica por todo San Luis para lograr las firmas de las actas, más la documentación que debe acompañar cada proyecto. Finalmente, los que  cumplimentaron  los requisitos formales y técnicos fueron enviados a Nación para su evaluación y aprobación final, para conseguir la disponibilidad de fondos. Vale recordar que los productores beneficiados no reciben el dinero en mano, sino las órdenes de compra para que puedan retirar los materiales solicitados en los negocios que ellos mismos eligieron.

 

“La diversidad temática fue la regla este año. Recibimos todo tipo de inquietudes, una empresa pidió un sistema innovador en la producción de ovejas en cama profunda, que se  traduce en producción estabulada  y mayor eficiencia en conversión alimento-peso; otros optaron por aumentar el stock ganadero ovino bajo diferentes modalidades; están quienes quieren hacer una producción intensiva de corderos o integrar el circuito de la carne hasta la puesta en carnicerías; y también quienes desean incorporar genética y mejorar la producción en tierras anegadas, con la consecuente recuperación de los campos”, enumeró Delgado.

 

 

Además de los tradicionales, San Luis solicitó un aporte para la instalación de un centro de acopio de lana, que estará en Villa Mercedes.

 

Lo mejor que rescataron los funcionarios es que en varios de los proyectos se observa el compromiso del productor, que muchas veces decidió invertir por encima del aporte solicitado, lo que habla a las claras que no esperan que el Estado solucione todo su planteo, sino que están decididos a ir por más.

 

La mayor parte de los proyectos presentados a la Nación han sido aprobados y se encuentran en diferente grado de avance, lo que demuestra el buen trabajo de selección de la UEP. Algunos beneficiarios ya firmaron la parte contractual del compromiso y están a la espera de la disponibilidad de los fondos. Un par de proyectos se encuentran demorados en los vericuetos legales que tiene el trámite burocrático en las oficinas de Agricultura, pero hay mucha confianza en la UEP que se van a resolver a la brevedad, ya que las observaciones realizadas en primera instancia ya fueron subsanadas.

 

Como ocurre cada año, hay más dinero para concretar planes ovinos que caprinos. Por eso San Luis tiene en marcha ocho que benefician a criadores de ovejas y corderos por casi 3 millones y medio de pesos y solo dos para los de cabras, ya que contó apenas con poco más de 600 mil pesos.

 

 “De los proyectos caprinos, uno se encuentra en la fase de disposición de fondos desde San Luis; en tanto el otro está aprobado y a la espera de que quede algún excedente de otras provincias para completar lo que pidió el beneficiario”, aclaró la coordinadora de la UEP.

 

 

Variedad. Los proyectos ovinos presentados apuntan a estrategias muy diversas y están diseminados por toda la provincia. Foto: Revista El Campo.

 

 

Un aporte innovador

 

Más allá de los beneficiarios que recibirán sus aportes por la vía tradicional, por primera vez la provincia solicitó un beneficio por fuera de los fondos otorgados por la formulación de proyectos. Es un recurso contemplado en el artículo 19 de Ley Ovina que sirve para canalizar las necesidades de grupos de productores ovinos bien definidos, que comparten demandas colectivas. En este caso se utilizará para la instalación de un centro de acopio de lana, lo que les permitirá a futuro vender a mejor precio, que estará ubicado en Villa Mercedes.

 

“No tiene límite o piso, hay que fundamentar por qué se pide. Tienen que ser necesidades transversales, que beneficien a una región o a un grupo de productores amplio, hay que fundamentar muy bien el pedido. La inversión se hará a través de una cooperadora del INTA, porque se necesita una estructura asociativa que sostenga el pedido. Van a comprar portabolsones para la lana y equipos de esquila”, describió Delgado, quien agregó que “tendrán un reglamento interno para manejar los elementos. Hay dos sectores que pueden beneficiarse si todo sale bien: el grupo ovino San Luis de Cambio Rural, que coordina Esteban Suárez Follari; y otro que está ubicado en la zona del Valle del Conlara, conformado por productores y veterinarios que se organizaron por sí solos”.

 

La idea es armar grupos de esquiladores para las dos zonas, que serán capacitados a través de Prolana, una iniciativa que lleva muchos años y que está al servicio de los productores ovinos para que puedan agregar valor. “Pidieron dinero para comprarles las herramientas y también para la adquisición de una balanza especial, de mucha precisión, que es la que se necesita en la producción de lana. También hay que capacitarlos para que disciernan cómo manejan la lana, qué parte guardar, es una tarea que la hacen los acondicionadores. En San Luis no hay un desarrollo de este tipo de profesiones, suelen venir de otras provincias a trabajar, por lo que será muy importante armar un plantel propio, compuesto por esquiladores que además tienen que tener conceptos referidos al bienestar animal, que hoy son muy importantes. Es valor agregado puro, lo que implica mejores márgenes de ganancias”, se entusiasma Delgado, ya que se crearán nuevos puestos de trabajo en un sector que no tiene esquiladores en San Luis. Y encima hoy viene a solucionar un problema logístico, porque debido a la pandemia no pueden entrar desde otras provincias.

 

 

Este año nos encontramos con mucha variedad en las solicitudes y eso es bueno para poder crecer. Gabriela Delgado

 

Como está involucrada una cooperativa del INTA, la Estación Experimental de Villa Mercedes hizo sus aportes a la formulación del proyecto, pondrá a disposición el galpón para el acopio y también la estructura de la cooperadora para la administración. En tanto, la provincia coordinó de manera precisa los requerimientos y la factibilidad del proyecto, que actualmente se encuentra a la espera de su aprobación.

 

“Para la provincia la implementación de las leyes ovina y caprina no es algo menor. En la articulación de las diferentes acciones destinadas a pequeños y medianos productores, el financiamiento de estos grupos o asociaciones tiene efectos múltiples: por un lado, motiva a quienes lo reciben a continuar con las tareas en el campo, favorece el intercambio de experiencias entre productores y motiva a criadores vecinos a pensar en la factibilidad de concretar proyectos. Y todo redunda en un arraigo rural más fuerte. Estas acciones, como herramientas  complementarias,  sumadas a las políticas de gestión del Ministerio de Producción, tienen un objetivo productivo, pero fundamentalmente de oportunidad y de arraigo”, concluyó la coordinadora de la UEP, quien durante muchos años trabajó en el Laboratorio del Campo, ya que es médica veterinaria.

 

 

Valor agregado. El Ministerio de Producción quiere montar un acopio de lana. Foto: Revista El Campo.

 

 

Los beneficiarios

 

Dentro de la Ley Ovina, el dinero que recibirán los productores puntanos suma $3.460.171,15; con proyectos que van de un rango aproximado de $246.000 para los menores hasta $824.000 el descripto líneas arriba que comprende instalaciones para una producción intensiva y estabulada con la compra del sistema de cama profunda para las ovejas.

 

Son nueve beneficiarios en total, con siete que ya están confirmados y a la espera del dinero y otros dos que tienen todo en regla y solo falta la firma final de Nación para que se concreten. Hay productores individuales, personas jurídicas y, si todo sale bien, hay que sumar el aporte por el artículo 19 que solicitó la provincia y se canalizará a través de la cooperativa del INTA.

 

 

Este año vence la Ley Ovina y el Congreso la tiene que renovar. Quieren simplificar las cuestiones técnicas agregando nuevos planes.

 

También es muy federal el reparto de fondos, con criadores de Alem y Luján en el Departamento  Ayacucho; otros de La Toma y Río Grande (Pringles), Naschel (Chacabuco) y Juan Jorba (Pedernera), lo que demuestra que la cría ovina no tiene limitaciones geográficas o climáticas, ya que se ha distribuido por todo el territorio de San Luis.

 

Los proyectos caprinos son dos. Uno es un grupo denominado ‘Caprinos del Oeste’, que recibirá un monto de $426.413,39. Está compuesto por seis familias que tienen aproximadamente 130 animales cada una en el paraje Las Lagunitas, en cercanías de La Calera. El otro beneficiario es Guillermo Pérez, un criador de cabras que tiene su campo pasando el dique Nogolí, en la ruta que luego conduce a Río Grande.

 

Allí produce quesos y dulce de leche de manera artesanal, por lo que ahora quiere comprar una máquina para aumentar su volumen. Por eso solicitó $228.206 en un proyecto que le ayudó a formular Leonardo Janjetic, un coordinador de Agricultura Familiar muy activo en la búsqueda de darles una mano a los pequeños productores.

 

LA MEJOR OPCIÓN PARA VER NUESTROS CONTENIDOS
Suscribite a El Diario de la República y tendrás acceso primero y mejor para leer online el PDF de cada edición papel del diario, a nuestros suplementos y a los clasificados web sin moverte de tu casa

Suscribite a El Diario y tendrás acceso a la versión digital de todos nuestros productos y contenido exclusivo