El Laboratorio de Genética Forense ya colaboró en más de 2.200 casos

Este lunes  cumple diez años el Laboratorio de Genética Forense-Análisis de ADN, que pertenece a Laboratorios Puntanos SE. A lo largo de su trayectoria, la institución desplegó un rol fundamental como auxiliar de la Justicia para la resolución de diferentes causas y también concretó un servicio eficaz en torno a la determinación de vínculos biológicos. De acuerdo a lo que señaló su directora, Virginia Divizia, quien es licenciada en Biología Molecular y perito experto en Genética Forense, hasta el momento actuaron en la resolución de un total de 2.265 casos. La cifra está conformada tanto por pedidos particulares como judiciales.

“La institución surgió principalmente por la necesidad del Poder Judicial para poder realizar análisis de ADN. Antes todas las muestras para este tipo de estudios que venían de la mano de un juzgado de familia, por ejemplo, o las evidencias que se levantaban en homicidios, violaciones y otros delitos penales, se tomaban aquí en la provincia, pero se tenían que llevar a un laboratorio de Buenos Aires o Mendoza, donde las enviaban en mayor medida. Esto implicaba un gasto muy grande porque las muestras debían ir con una cadena de custodia que preservara las evidencias de casos muy importantes y complejos”, detalló la titular del establecimiento.

La inauguración se realizó durante la gestión del gobernador, Alberto Rodríguez Saá, en 2011. La puesta en marcha estuvo acompañada por el doctor Gustavo Penacino, quien es un pionero en ADN y genética forense. Incluso en la actualidad continúa con el asesoramiento en determinadas situaciones.

Según detalló la directora del laboratorio, el espacio está equipado con instrumental automatizado de última generación y su equipo profesional cuenta con capacitación permanente. La calidad de los procesamientos es evaluada por la Sociedad Latinoamericana de Genética Forense y la International Society for Forensic Genetics-Grupo de habla española y portuguesa, entidades que organizan anualmente controles de calidad externos de los que el laboratorio participa voluntariamente.

De acuerdo a lo que indicó Divizia, estos organismos envían al laboratorio muestras incógnitas para procesar, que pueden ser hisopados bucales, sangre o material cadavérico y lo que hacen las especialistas puntanas es procesar las muestras. Del estudio se obtiene un perfil genético que se carga a un formulario online. Todos los laboratorios que participan del control de calidad tienen que encontrar el mismo resultado, ya que una muestra procesada en cualquier país arroja el mismo perfil genético.“Hace años que hacemos estos controles de calidad y ello da la garantía de nuestros resultados, que son muy confiables. Aprobamos los controles y nos superamos ampliamente”, dijo.

“El día de la inauguración se firmó un convenio con el Poder Judicial donde se estableció que íbamos a procesar todas las muestras que llegaran por la vía judicial. Actualmente procesamos muestras judiciales y también requerimientos del ámbito privado, en los que las personas pueden acceder a un estudio de ADN con total confidencialidad. El equipo de trabajo está conformado por la bioquímica Belén Barloa, la licenciada en Biología Molecular, Verónica Nollac, María de los Ángeles Pipitone y Verónica Franco, que se ocupan de las tareas administrativas, y
Elizabeth Miranda que nos acompaña en limpieza. Somos un equipo que funciona perfecto y que no paró en toda la pandemia”, subrayó.

En lo que va de la creación del laboratorio, colaboraron en la resolución de 2.265 causas, de las que 957 corresponden a pedidos de particulares y 1.212 a las muestras que llegaron por vía judicial. De acuerdo a lo que describió Divizia, una causa puede tener dos personas que buscan, por ejemplo, la determinación de un vínculo de maternidad, paternidad, abuelidad, tiandad y media hermandad, o 50 muestras de cara a la búsqueda de un homicida. En este sentido la cantidad de pruebas concretadas se multiplica.

Según las estadísticas oficiales, año a año los procesamientos se incrementaron. Para dar una idea, en 2012 se registraron 29 causas particulares y 107 judiciales, es decir, un total de 136. Ya para 2016, las particulares ascendieron a 91 y las judiciales a 113; 204 en el total anual.

En 2019 hubo 128 causas particulares y 180 judiciales; un total de 308. En 2020 se observó una merma que obedece a la pandemia, tiempo en que se interrumpieron algunas cuestiones judiciales. Ese año se procesaron 107 causas particulares y 78 judiciales. En lo que va de 2021 se observó el mayor salto en la serie numérica, con 162 causas particulares y 161 judiciales; un total de 323.

Entre otras referencias, del total de muestras en las que se trabajó este año, el 67% resultaron de inclusión del vínculo biológico, lo que se traduce en que los resultados fueron positivos, mientras que el 33% fueron de exclusión del vínculo biológico, es decir que los resultados fueron negativos.

“Es un orgullo inmenso integrar este equipo. Estar en la dirección técnica es tan importante como el primer día. Todas las causas son completamente diferentes y aprendemos cosas nuevas, continuamos deslumbrándonos por la ciencia. Y que el Gobierno nos acompañe en este proyecto es muy importante”, concluyó.

Perfiles genéticos:

El laboratorio  emite  los  perfiles genéticos que se envían al Registro Provincial y al Banco Provincial de ADN de condenados por delitos contra la integridad sexual.

Cuando un juez da la orden, extraen muestras para obtener el perfil genético de una determinada persona a través de un hisopado bucal. Ese perfil comprende una combinación de números que se remiten a la Justicia y desde ahí se envían al banco de ADN.

El banco ha servido para hacer cotejos de personas implicadas en delitos sexuales de otras provincias. Hasta el momento se emitieron 93 perfiles genéticos.

Redacción