13°SAN LUIS - Lunes 06 de Mayo de 2024

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La UEP cerró el año con un balance más que positivo

Sus autoridades lograron aprobar proyectos por fondos que excedieron el presupuesto otorgado por la Nación. Y ya comenzaron a pensar en un 2022 aún más productivo.

Por Marcelo Dettoni
| 19 de diciembre de 2021
Exposición. Gabriela Delgado, la coordinadora de la UEP, condujo la reunión, pero todos pudieron participar con sus opiniones. Fotos: Héctor Portela y Archivo

La Unidad Ejecutora Provincial (UEP), que es la que facilita la aplicación de las leyes Ovina y Caprina en San Luis, tuvo su reunión de cierre del año, que sirve para que la coordinadora Gabriela Delgado exponga los números de su gestión y los productores puedan explayarse sobre las dificultades que tuvieron, la marcha de sus proyectos o simplemente escuchen a sus pares y compartan experiencias, ya que en definitiva están todos en el mismo barco.

 

La cita fue en el Salón de la Puntanidad, en Terrazas del Portezuelo y contó con una buena cantidad de criadores de ovejas y cabras y la presencia, por el Ministerio de Producción, de Juan Manuel Celi Preti y Bárbara Castiglione, quien trabajan codo a codo con Delgado para llevar adelante la misión de ayudar a los productores para que puedan acceder a los beneficios económicos que otorga la norma.

 

En el auditorio estuvieron los productores Gastón Comino, Javier Dupuy, Juan Echanis, Mario Guerra y su esposa Eli, Abel Buttazzoni y su socio Ezequiel Busso y representantes de distintas entidades del campo puntano, como Yenny Yurchag (presidenta de la Sociedad Rural de San Luis), Esteban Suárez (por el INTA) y profesionales de Senasa y Agricultura Familiar, ya que todos son parte importante de la UEP. La lluvia complicó la presencia de los productores del norte de San Luis que coordina Leonardo Jangetic y de Carlos Cavadore, quien representa a la Sociedad Rural Río Quinto.

 

Delgado arrancó enumerando los encuentros de un año complicado, en el que de a poco se fue saliendo de la pandemia. Por eso fueron nueve reu-niones virtuales y apenas tres, las últimas, con la modalidad presencial; a lo que hay que sumar la presencia de la provincia, de manera remota, en la Comisión Técnica (CAT), que es el encuentro entre los delegados de las 24 provincias y donde se definen los montos que cada una va a recibir para distribuir entre los proyectos.

 

También hubo una capacitación que organizó la UEP para los formuladores, vía virtual, a la que asistieron 26 profesionales que recibieron recomendación de Castiglione y Silvana Benítez, del INTA. Había programada otra del programa Prolana, sobre esquila y acondicionamiento, pero no se llevó a cabo por problemas logísticos de los representantes del Ministerio de Agricultura encargados de dictarla.

 

Como para que los productores y los técnicos vayan adaptando sus pretensiones, la coordinadora reconoció que "no sabemos qué pasará en 2022", ya que hay una nueva ley ovina aprobada por el Congreso, pero que todavía no fue reglamentada por el Ejecutivo (es un paso vital para conocer el destino de los fondos y los modos de aplicación) y tampoco está claro el futuro de la UEP como organismo, ya que el texto contempla otras maneras de gestionar los aportes, por lo que también hay que esperar la reglamentación.

 

"No importa quién siga al frente, lo bueno es que en San Luis ya hay una infraestructura que se debe mantener. Cuidemos este espacio que se consolidó con los años y sobre todo dejemos de lado las cuestiones personales", arengó Delgado con vehemencia.

 

Como en el sector caprino hay algunos problemas, el representante del INTA propuso sumar a la UEP al frigorífico de Sol Puntano.

 

 

Balance del año que se va

 

Sobre el 2021, la UEP aprobó ocho proyectos por un monto de $6.462.386,19; en tanto que a la provincia le correspondían poco menos de tres millones. "Por eso hubo que asignar prioridades", explicó la coordinadora, que siempre "rema" contra las dificultades junto con Celi Preti. Tanto esfuerzo a veces se ve recompensado, porque Nación aprobó luego cinco de esos ocho proyectos, por $3.801.106,89; por lo que estuvieron excedidos en $842.193 por encima de lo presupuestado, quizá por el buen desempeño de la UEP en el aspecto técnico y en el recupero de cuotas de años anteriores.

 

Del resto, en uno falta la firma del mutuo (o pagaré) de parte del beneficiario, y hay otros con fondos disponibles sin ejecutar. Por eso Delgado los empujó: "Compren ya lo que pidieron, porque la inflación después desvaloriza todo. A uno le falta adquirir la alfalfa, quiere cambiar de proveedor, está dando vueltas. Hay que definir rápido".

 

También lamentó que un proyecto aprobado finalmente no se ejecutó y fue dado de baja, por lo que "perjudicó a otro productor que podría haber aprovechado ese cupo de dinero".

 

Dos criterios diferentes

 

Durante el año, Delgado y Celi Preti también tuvieron un contrapunto con Nación, que se definió a favor de ellos. Pasa que desde Buenos Aires pedían bajar los montos de todos los proyectos para poder aprobar más y la UEP se negó. "Hubiera querido significar que los productores pidieron de más o también podría pasar que después se produce un fracaso por falta de fondos", argumentó Celi Preti.

 

Por eso decidieron ir por más fondos, ya que "no quisimos poner a los productores en un aprieto y que bajaran sus presupuestos", explicó ante todo el auditorio, fijando pautas que bien podrían ser útiles para el año que viene.

 

Mientras la coordinadora agradeció el acompañamiento del funcionario provincial, este le dio todo el mérito: "Nosotros acompañamos la jugada desde el Ministerio de Producción, fue arriesgada, pero resultó exitosa".

 

En cuanto a los proyectos caprinos, en los que se priorizan los que presentan las asociaciones sobre los individuos, se cristalizaron dos con aportes no reintegrables por $984.764,39. Otra vez hubo un exceso, porque lo presupuestado por Nación fueron $546.212, o sea la mitad.

 

Uno corresponde a la Asociación de Pequeños Productores Caprinos del Centro-Norte de San Luis, que aún no tiene los fondos porque hubo un problema legal con un integrante, quien tiene un empleo en la administración provincial, lo que no está permitido. "Hay que tener cuidado, porque firman declaraciones juradas y al final se perjudica todo el grupo", alertó Delgado. Mientras que el otro fue de un particular, que aún no los ejecutó.

 

“Los productores deben informar todos los movimientos a la UEP. Nosotros siempre los vamos a acompañar y defender sus proyectos” Graciela Delgado.

 

Un punto clave para la UEP es el de el seguimiento y la evolución de los proyectos. Este año hicieron visitas al productor Guillermo Pérez, de Nogolí, quien pidió una paila para intensificar la fabricación de dulce de leche; y también a la Mesa Caprina del Norte, que recibió una abonadora para aprovechar el guano y producir pasturas.

 

Delgado puso énfasis en la formulación y dio como ejemplo que "el llenado de un silo debería ser un plan de trabajo y uno un proyecto de inversión en sí mismo. No lo contempla el manual operativo, pero estaría en la nueva ley", advirtió.

 

Otras salidas a campo por la Ley Ovina incluyeron a la Asociación Civil de Pequeños Productores El Arenal, la firma Suplenfeed y los criadores Hernán Fontana, Sebastián Peracchia y Leandro Yaccarini. "Agradecemos la ayuda de la provincia para llegar a lugares de difícil acceso", remarcó la coordinadora, quien hace pocos días acompañó a la revista El Campo al establecimiento de Federico Reta, quien adquirió dos corrales con cama profunda para cría ovina, el primer proyecto de este tipo en la Argentina.

 

El espíritu de las leyes

 

Si bien no había muchos formuladores en el salón, Delgado también se refirió a ellos y propuso cambiar algunas formas de trabajo a futuro. Como todo lo dicho quedó asentado en las actas, luego llegaría a oídos de los interesados, seguramente.

 

Hay dos cuestiones básicas que la UEP quiere desterrar. Una es la práctica de algunos formuladores que arrancan con un proyecto y luego se desentienden. "Si hacen eso, no están cumpliendo con su función", aseguró. Suárez, el técnico del INTA, intentó una justificación citando algunos casos que sucedieron en Córdoba y argumentando cierta "volatilidad" de los productores.

 

Pero la coordinadora redobló la apuesta y dijo que "hay formuladores, tanto privados como de organismos estatales, que salen a 'vender' los créditos". O sea que entusiasman a los productores, aunque no necesiten el aporte. "Es al revés, el beneficiario debe buscar al formulador. Y este debe preguntar qué quiere, para qué y luego arrancar con la parte técnica". Y puso como ejemplos otras provincias: "En La Rioja formula solo el INTA, en San Juan y La Pampa lo hace la UEP. A mí me gusta nuestro sistema, pero siempre hay cosas para perfeccionar, por la Ley Ovina es inversión, no tiene un fin social", cerró.

 

Una buena noticia es el alto nivel de recupero de cuotas que tiene San Luis. En 2021 recaudó $925.100,95 porque en general, reconoció la coordinadora, "hay buena voluntad de pago, lo que redunda en beneficios para todos: a más cumplimientos, más fondos para el año próximo; y con ese dinero se podrán llevar a cabo dos proyectos más".

 

Un 2022 muy ajetreado

 

Para el año próximo, más allá del destino de la Ley Ovina y de la UEP en general, ya hay programada una capacitación en esquila con especialistas de Catamarca.

 

Y para la reunión inaugural de febrero, Delgado les pidió a todos los integrantes que piensen las mejores maneras de formular los proyectos, sobre todo pensando en el perfil del beneficiario, para evitar errores y frustraciones a futuro.

 

Como la nueva ley no está reglamentada y todavía rige la adhesión provincial a la anterior, hay interrogantes sobre qué pasará si sale tal cual como la dejaron los legisladores. Un punto clave es que otorga facultades de acción jurídica a las provincias, que deberían encargarse de ejecutar los créditos no devueltos. Es algo que el Ministerio de Producción deberá resolver en conjunto con la UEP.

 

También desaparece la figura del coordinador y se reemplaza por un director, por lo que habrá que ver cómo queda el nuevo organigrama si estos cambios finalmente se cristalizan en la realidad.

 

Otro punto borroso es el que asigna los fondos según el stock, lo que favorece claramente a las provincias patagónicas. Pero el texto interpone la palabra "prioritariamente", lo que deja lugar a interpretaciones que habrá que resolver en la CAT de febrero próximo.

 

El tramo final fue para hablar del sector caprino. "Estamos mal", reconoció Delgado, refiriéndose a la escasez de fondos y a una ley desactualizada, que recién vence en 2026. "Hay que interrelacionar la ley caprina con otras que otorgan fondos nacionales, como el Prodeca", propuso.

 

Suárez, muy activo, dijo que sería bueno "incorporar a la UEP a un representante del frigorífico de Sol Puntano. Tenemos la bendición de contar con ese espacio en el patio de la casa y la faena es el talón de Aquiles en todo el país. Los frigoríficos dicen que no hay volumen suficiente y los productores, por el contrario, se quejan de que no tienen donde faenar". Por eso la coordinadora, rápida de reflejos, aseguró que "vamos a invitar a alguien para la primera reunión del año que viene".

 

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