Desde hace 40 años, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) evalúa el estado de la libertad de prensa en el mundo y los datos de 2021 presentan un panorama complejo: un número récord de periodistas terminó en la cárcel, al menos 293. Y al menos 24 fueron asesinados por causas relacionadas con su trabajo.
Otros dieciocho murieron en circunstancias demasiado turbias como para determinar si los ataques estuvieron específicamente vinculados a su labor periodística.
Especialistas, periodistas comprometidos y funcionarios públicos de la organización presionan por un cambio que permita tener medios de comunicación libres y sin miedo.
La campaña #FreeThePress intentará durante el 2022 poner fin a los encarcelamientos. La Red Legal para Periodistas en Riesgo busca proteger a los medios de comunicación independientes de los mortales golpes que agotan las finanzas de las organizaciones de noticias y obstaculizan la información crítica.
El año pasado, el CPJ ayudó a liberar a 101 periodistas encarcelados, el mayor número que ha logrado poner en libertad. Esto incluye a casi 40 liberados en Medio Oriente y el norte de África y 21 en Europa y Asia Central, concretamente en Turquía.
Parte del trabajo consiste en descubrir la verdad sobre los asesinatos de periodistas y lograr justicia.
Entre los grandes logros de 2021 están las medidas adoptadas para detener el uso ilimitado de programas espía contra periodistas y otras personas. Poco después que el CPJ informara al Departamento de Estado de Estados Unidos sobre esa amenaza, el gobierno estadounidense impuso controles de exportación a varios proveedores.
Asimismo, la Unión Europea adoptó una norma contra la exportación de tecnología de vigilancia de doble uso por parte de empresas con sede en la UE para
evitar el uso indebido contra periodistas y otras personas. El CPJ subrayó su compromiso contra la militarización de la tecnología en todo el mundo.
Un año que comenzó con periodistas violentamente agredidos en los disturbios ocurridos en el Capitolio, en Washington, culminó con la celebración del Premio Nobel de la Paz otorgado a otros dos, defendidos y apreciados desde hace mucho por la comunidad internacional: Dmitry Muratov y Maria Ressa.
Durante el 2021, la incertidumbre primó: la pandemia de COVID-19, la crisis climática, la omnipresencia de las nuevas tecnologías y los regímenes autoritarios dejaron claro que el mundo cambia con enorme rapidez.
Un periodismo serio ayuda a tomar decisiones informadas y a hacerle frente a un mundo cada vez más complejo.
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