23°SAN LUIS - Jueves 25 de Abril de 2024

23°SAN LUIS - Jueves 25 de Abril de 2024

EN VIVO

Cómo manejar la mirada del otro

Mucha gente tiene dificultad para enfrentar la mirada de la gente. Si te sentís identificado o identificada, deberías recordar que la opinión que cada uno tiene de sí mismo es una cuestión personal. Mientras que la opinión que otro tenga de vos es algo que no debería importarte.

 

Si, por ejemplo, alguien me insulta, sus palabras únicamente me afectarán si yo creo que lo que esa persona dijo es verdad. Esto significa que yo pienso lo mismo que él o ella sobre mí mismo, que la voz externa coincide con mi voz interna. De lo contrario, no existe motivo alguno para sentirme mal.

 

Entonces, más allá de cómo nos vean los demás, es uno el que le otorga valor a una opinión ajena, o no. Lo cierto es que es imposible agradar a todo el mundo. Siempre habrá alguien que nos critique, que nos juzgue, que hable mal de nosotros. De modo que lo mejor es no esperar ser aceptados por todos.

 

Por otro lado, muchos de quienes se enfocan en la mirada social lo hacen porque, en el fondo, no son capaces de amarse a sí mismos. Como consecuencia, tienen una reacción negativa ante la primera provocación. Lo más aconsejable para cuidar nuestra salud física y emocional es no reaccionar y fijar límites sanos.

 

Un párrafo aparte merecen las interacciones en redes sociales. Hay gente que se preocupa mucho frente a comentarios agresivos. Aquí, es importante saber que una persona que no nos quiere optará por ignorarnos. Cuando alguien pierde tiempo en buscarnos en Facebook o Twitter y atacarnos, solo pretende llamar nuestra atención.

 

Quien recibe muchos mensajes positivos y uno solo negativo y se queda atascado en este último ha activado la mirada del otro en su vida. Entonces, ¿cómo nos conviene comportarnos en las redes? Básicamente, sin reaccionar. Porque hacerlo significa darle un valor afectivo a la mirada ajena, sobre todo cuando es negativa.

 

Un jefe, un compañero o, incluso, un desconocido, solo debería ser para nosotros una fuente de datos. Es decir, que recibimos la información que nos da en forma de opinión o comentario, pero sin volcar nuestro afecto en ello. Cuando leemos “le gusto” o “no le gusto” caemos en la trampa de activar la mirada social.

 

Con respecto a los errores, lo ideal es no tomarlo como algo personal, cuando alguien nos marca uno, podemos reconocerlo y transformarlo en experiencia para mejorar. De esta manera, podemos usarlo a nuestro favor. Más allá de cómo lo utilice la otra persona (aunque sea para lastimarnos), tengamos presente que las equivocaciones de hoy nos ayudan a aprender y construir un futuro mejor.

 

Para ser capaces de manejar la mirada de la gente, que a veces nos molesta tanto, procuremos identificar nuestras fortalezas y debilidades. Esto nos permite tener una estima sana y valorarnos tal como somos.

 

Solo cuando nos animamos a ver el cuadro completo de cada uno de nosotros, con virtudes y defectos, es que nos volvemos emocionalmente fuertes y ya nada de lo que piensen otros nos afecta.

 

LA MEJOR OPCIÓN PARA VER NUESTROS CONTENIDOS
Suscribite a El Diario de la República y tendrás acceso primero y mejor para leer online el PDF de cada edición papel del diario, a nuestros suplementos y a los clasificados web sin moverte de tu casa

Suscribite a El Diario y tendrás acceso a la versión digital de todos nuestros productos y contenido exclusivo