Fuente de Luz se prepara para llevar la inclusión a la Calle Angosta

Tal como su nombre lo indica, la academia Fuente de Luz irradia energía e ilumina a los demás con su talento. El grupo conformado íntegramente por personas con discapacidad se prepara para volver a pisar el escenario de la Calle Angosta en el máximo festival que tiene la ciudad, como una confirmación más de que la inclusión en todos los ámbitos, incluso en el artístico, es posible.

En febrero el equipo cumplirá seis años de vida, y a lo largo de ese trayecto nunca paró de crecer.  Luciana Laconcha, la directora, encontró la forma de unir su pasión por la danza con un amor que descubrió después: el de trabajar con la discapacidad.

"Empecé a dar talleres y luego unas mamás se acercaron a pedirme si podía darles clases a sus hijas. Empecé con tres bailarinas y hoy son cincuenta", resumió sobre los orígenes de la academia.

La profesora reconoció, entonces, que había, y todavía hay, una gran necesidad de espacios culturales para que quienes tienen algún tipo de discapacidad puedan aprender, desarrollarse y expresarse libremente. "Ojalá que cada vez haya muchas más academias de este tipo, por eso insto a los demás a que se animen a hacerlo".

El plantel está conformado por niños desde 8 años hasta adultos de 63. Ya cuenta con otras dos instructoras que apoyan a Laconcha en la enseñanza de los diferentes estilos, que son muy variados, porque sostuvo que no querían encasillarse en ningún tipo de danza en particular, sino que han bailado desde música urbana hasta folclore.

"Lo único que hay que tener en cuenta es el amor y la paciencia. Enseñamos lo mismo, pero ellos aprenden de una manera diferente, a su tiempo. Solo se trata de estar con ellos, conteniéndolos y respetando su ritmo", afirmó Luciana.

Una diablada en la ciudad

A finales del 2022, los integrantes de Fuente de Luz viajaron a Jujuy para participar del Festival Nacional de Personas con Discapacidad. Tan buena fue la experiencia que decidieron traer un poco de la alegría y del carnaval del norte del país a la fiesta más importante de Villa Mercedes.

Por estos días ensayan para representar una diablada en el mítico "Alfonso y Zavala", que seguramente hará levantar de los asientos al público en la noche del viernes 27, en una jornada que tendrá a Soledad como número estelar, con quien ya compartieron escenario en Cosquín.

"Esa fue una experiencia mágica, pero para nosotros Calle Angosta es algo especial. Es nuestro, no tiene nada que envidiarle a otros grandes festivales", expresó convencida.

El grupo ensaya dos veces por semana para preparar el cuadro y, cuando las fechas claves se acercan, intensifican con un día más de actividad.

No solo lucen sus pasos y coreografías, sino que también se caracterizan por contar con vestuarios y trajes muy llamativos y coloridos, que requieren de mucho trabajo de confección.

Esta será la segunda vez que la academia estará en la fiesta de la Calle Angosta, por lo que llegarán con mucha más trayectoria encima. A lo largo del 2022, además de estar en Cosquín y Jujuy, participaron del Mundial de Folclore en Santiago del Estero, en donde compartieron con artistas de todo el planeta y fueron distinguidos como ballet consagrado.

"Todo se lo han ganado ellos por derecho propio. Cada vez que suben al escenario, los aplauden por eso. Ahí son bailarines, no son personas con discapacidad. Eso sí, a través de su condición te demuestran y transmiten algo que el resto quizá no te lo genera", remarcó.

Finalmente, Laconcha señaló que cada participación en algún encuentro repercute no solo en el talento de los integrantes del elenco, sino que los ayuda a desenvolverse desde el punto de vista social. "Como la cabeza del grupo en este momento, me da mucha alegría y felicidad ver cómo van progresando a nivel artístico y también en lo humano y en lo cultural. Cada vez que tenemos que viajar es tan rico lo que se genera y lo que se gana, que ellos vuelven muy felices", sostuvo.