Los Maruchos del Chorrillo, embajadores del folclore
El grupo musical cuyano nació en 1951. Tocaron en radios, teatros y en diferentes puntos de la provincia y en otras vecinas. Fue en la época en la que las guitarras no eran bien vistas por la sociedad.
Jorge "El Flecha" Arancibia Rodríguez, Domingo Emérito Carrera, Julio César Agundez y "Tito" Puglisi fueron los fundadores de Los Maruchos del Chorrillo, el grupo que en 1954 representó a San Luis en la Fiesta Nacional de la Tradición realizada en Buenos Aires. Se convirtieron así en el primer conjunto puntano escuchado en las emisoras nacionales que llevaron como estandarte la música cuyana y marcaron un hecho sin precedentes en la época.
Ante la repercusión alcanzada, el gobernador de San Luis, Víctor Endeiza, reconoció y felicitó al conjunto: "Como se hiciera conocer anteriormente por intermedio del periodismo, fue meritoria y destacada su actuación, resultando la expresión cabal del alma y sentir del pueblo puntano en aquella fiesta de magnitud y trascendencia nacional", dijo.
El diario Democracia publicó: "El gobernador de San Luis, Víctor Endeiza, felicita al conjunto tradicionalista Los Maruchos del Chorrillo en oportunidad de presentar estos sus saludos al primer mandatario, dando cuenta de la labor cumplida en aquella oportunidad en Capital Federal, representando dignamente a la provincia de San Luis".
"Por su parte, el conjunto de referencia ha expresado su sincero agradecimiento por la distinción que ha sido objeto, como así también por el apoyo y colaboración de altos funcionarios del gobierno provincial, que ha permitido de esa manera y por primera vez la actuación en Buenos Aires de un conjunto folclórico de nuestra tierra", consignaba el desaparecido diario sanluiseño.
Los Maruchos del Chorrillo nacieron poco después de que en 1947 se creara la Asociación Civil Sauces del Chorrillo, un centro tradicionalista cuyo nombre nació inspirado en una zamba de Ricardo Arancibia Rodríguez. Tenía entre sus objetivos cultivar la música, el canto y las manifestaciones del espíritu y del arte, conservando y propulsando las tradiciones. Su primer presidente fue Domingo Emérito Carrera.
El Democracia del 2 de julio de 1946 destacaba en un recuadro que por voluntad de la mayoría de sus asociados el centro se denominaría Agrupación Sauces del Chorrillo, en memoria del gran compositor puntano. La historia dice que esa institución nació cuando la música cuyana solo se escuchaba en bares y zonas periféricas de la ciudad, porque se la consideraba música de boliches. Hasta que en 1951 nacieron Los Maruchos del Chorrillo y el folclore cuyano comenzó a escucharse en salones, cines y teatros, a difundirse en la radio y escucharse en los hogares puntanos.
El grupo recientemente creado era dirigido por Domingo Emérito Carrera, un militar muy empapado en la música cuyana y quien venía de dirigir a Los Arrieros Puntanos, integrado por Félix Máximo María, "Tito" Puglisi y Luis Urtubey.
"El grupo contaba con el apoyo del gobierno de San Luis y desarrolló una intensa labor en la provincia y en provincias vecinas, cumpliendo importantes actuaciones radiales y teatrales". "Siempre recogieron el aplauso y el aliento de un público que, entusiasta, los siguió a través de innumerables presentaciones", decía la prensa de la época.
En diciembre de 1952, con el apoyo de la dirección de Cultura a cargo de Pedro Humberto González, Los Maruchos se presentaron en LV13 radio San Luis, logrando un inesperado éxito. En junio y julio de 1953, Cultura presentó un programa para divulgar nuestra tradición en la emisora puntana denominado "Seis leyendas puntanas", que había escrito Antonio Quiroga Allende, y Los Maruchos se encargaron de musicalizar.
Los diarios de la época remarcaron ese éxito. Los personajes eran interpretados por Norma Alba, Américo Roldán, Ernesto Negri, Raúl Heredia y Fernando Castel. Julio César Salinas completaba el staff con los efectos sonoros.
En agosto, Los Maruchos se presentaron en LV13 poniéndole música a una obra de Urbano J. Núñez, "Ciudad del viento heroico".
El 25 de agosto, por la onda de LV13 radio San Luis, se llevó a cabo una audición especial con motivo del 359° aniversario de la fundación de San Luis. Los afiches publicitarios destacaban la actuación de Los Maruchos del Chorrillo, “conjunto tradicionalista”.
Un hecho poco conocido ocurrió en 1952. El gobierno de la Provincia conformó una delegación artística denominada "Mensaje cultural para todo el pueblo", para que el 26 de julio se presentara en la ciudad de Justo Daract. Pero la muerte de Eva Duarte de Perón frustró la presentación de la embajada artística.
El conjunto sufrió una baja en estructura: Julio César Agundez dejó la formación para conformar su propio grupo; a los Maruchos se sumaron Carlos Heredia y Medardo Herrera. En 1954, viajaron a Mendoza para actuar en radio Aconcagua en los festejos de un aniversario más de la creación de la Universidad Nacional de Cuyo.
Posteriormente, viajaron a General Pico, La Pampa, como parte de la delegación oficial que encabezaba el gobernador de San Luis, durante los actos de la firma de convenios de turismo social.
"Cholita" Carreras dice, en su libro "El folclore que yo viví": "Los Maruchos del Chorrillo prestaron colaboración a todas las instituciones que la pidieran; lo hacían con el objetivo de establecer vínculos culturales y también lo hacían con provincias vecinas, con el propósito de brindar su música a un pueblo ávido de conocer y aplaudir figuras del folclore cuyano que por aquellos años solo llegaban a través de la radio".
El 6 de marzo de 1953, Los Maruchos se presentaron en una velada de gala de Félix Pérez Cardozo, que estaba en la cúspide de su carrera artística. Cardozo actuó en la confitería Sportman ante un lleno total. En abril de ese mismo año, llegaron Los Troperos de Pampa de Achala, grupo musical vastamente conocido, dirigido por el folclorista Marcos López.
El éxito y la buena fortuna acompañaron a este conjunto hasta mediados de 1955, cuando a Emérito Carreras le diagnosticaron leucemia. Fue trasladado al Hospital Militar en Buenos Aires, pero falleció el 11 de enero de 1956, a los 46 años. Ese fue el inicio del final del destacado conjunto, del que, poco después, sus componentes tomaron rumbos distintos, hasta su disolución total.
Hoy, Julio César Agundez —hijo— cuenta: "Mi viejo se juntaba a guitarrear con varios amigos, entre ellos el poeta merlino Antonio Esteban Agüero —quien en una oportunidad llegó con el gran poeta chileno Pablo Neruda—, 'Chocho' Arancibia y varios músicos de la zona. 'Coco', mi hermano mayor, siempre se mostraba en desacuerdo con mi padre, quien defendía a rajatabla la música cuyana y él veía que nuestra música no tenía mucha repercusión, pese al esfuerzo que se hacía".
El 4 de noviembre de 2006, El Diario de la República replicó una histórica foto relacionada al auge del folclore cuyano en San Luis. La misma fue tomada en el cine teatro Ópera, escenario de grandes reuniones folclóricas: Luis Urtubey, "Tito" Puglisi, "Chocho" Arancibia, Juan Muñoz, Grillo, Pereyra, Julio César Agundez, Ricardo Arancibia, Sosita, Emérito Carreras, Jorge Arancibia, César Ferramola, Sebastián Arce, Calderón, Alberto Magallanes, Rufino Martin y Julio Arnó, entre otros.
"Pupa" Agundez dice: "Nuestra casa paterna de Rivadavia y 25 de Mayo tenía un enorme patio, galería. Por las noches, y cuando cerraba la escribanía, comenzaban a llegar sus amigos y conocidos guitarreros, a veces integrantes de Los Maruchos, el doctor Ricardo Zavala Ortiz, José Grillo con su bandoneón, o personas que al enterarse de la guitarreada se acercaban al lugar. También se juntaban en la casa de Emérito Carreras, en calle Belgrano, o en la casa de Pedro Sosa, de calle Pringles, donde se comían exquisitas cazuelas. Así le daban rienda suelta a la música cuyana. Mi padre tenía un jeep carrozado en el que los fines de semana se iban de farra a Mendoza, haciendo apuestas entre ellos; era una sana manera de divertirse. Una anécdota que siempre recuerdo —aunque yo era muy niño— es cuando en Desaguadero nos hizo seña de detención un control policial limítrofe. Le pidieron registro de conductor y no tenía; le faltaban luces y, desde adentro, una voz le gritó al policía: 'También tenemos otra infracción... señor policía... al conductor le falta un brazo'. Nos reímos todos... hasta el policía".
Según la historia folclórica sanluiseña, Agundez dejó Los Maruchos del Chorrillo y armó Los Reseros del Conlara, grupo musical que se inició en el campo La Alameda, cerca de La Carolina, propiedad de Kito Zavala. Una frase tradicional representaba al grupo: "De los Cerros Largos al norte, en donde nace el Conlara, viene esta tropa de ensueños, emociones y esperanzas". Estaba integrado por Emiliano Agundez, Lucero de La Toma, Cirilo Magallanes, Isaac Miranda, el "Quirquincho" Quiroga y Lazcano. “Tito” Puglisi, mientras tanto, armaba una formación diferente y con buenas guitarras de San Luis.
Al tiempo, Los Maruchos del Chorrillo terminaron por disolverse. La muerte de Carreras y las partidas de Agundez y de Puglisi fueron marcando el derrotero del primer conjunto folclórico de San Luis que pisó los escenarios de Capital Federal.
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