Inquietud en los trabajadores de la televisión por cable por rumores de venta
Algunos trabajadores fueron llamados para llegar a un acuerdo de cese de actividad. El papel de un empresario con estrechos vínculos con el aparato comunicacional del gobierno.
Los 180 trabajadores de una empresa de televisión por cable de la ciudad viven días de intranquilidad debido a los rumores cada vez más fuertes que señalan la intención de los dueños de desprenderse del bien. De hecho, algunos de los empleados ya llegaron a un acuerdo para la desvinculación.
Si bien el porcentaje de agentes que aceptaron el trato no sería elevado (se dice que son 38) el clima de trabajo en Carolina Cable Color, proveedora de servicio de televisión por cable pero también de internet, no es el ideal. Y a partir del lunes podría ser peor, ya que las autoridades tendrían decidido reducir el horario de trabajo.
La gerenta de la empresa, Fabiana Iribarren, mano derecha del empresario Victorio Gualtieri, el dueño, fue la encargada de hablar con los empleados para ofrecerles el acuerdo.
Aparentemente, el proceso de venta estaría muy avanzado y el futuro comprador no quiere mantener a los empleados de mayor antigüedad. Según lo que se dice en la empresa, si se cierra la operación, el traspaso sería en agosto.
Los empleados de CCC manejan dos versiones respecto a quien adquirirá el canal. Una señala que es un privado del que no tienen demasiada información; la otra es que sería un empresario de medios muy cercano al gobernador Claudio Poggi y a su operador, Facundo Santarone.
Temen que sea la segunda opción la que finalmente se materialice ya que un nombre que se escucha con temerosa frecuencia en los pasillos del canal es el de Alejandro Spinello, de estrechísima vinculación con el aparato comunicacional del oficialismo, encargado, entre otras actividades, de acercar a Telefe al canal provincial. El polémico empresario estaría al tanto de todas las comunicaciones que tienen Iribarren y los trabajadores.


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