Justo Daract inauguró el Centro Cultural “Vicente Lucero” en homenaje al escultor local

En una jornada cargada de emoción y memoria colectiva, el municipio de Justo Daract inauguró oficialmente el Centro Administrativo y Cultural “Vicente Lucero”, un espacio que rinde homenaje a uno de los artistas más representativos de la localidad y la provincia: el maestro escultor Vicente Lucero.

El acto contó con la presencia del intendente Alfredo Domínguez, autoridades locales, concejales, legisladores, artistas y vecinos que colmaron el renovado espacio ubicado en el corazón de la ciudad. La iniciativa representa no solo la puesta en valor del arte y la cultura daractense, sino también un reconocimiento a una figura que durante décadas permaneció en el anonimato a pesar de su legado.

“Ya no habrá un daractense que no sepa quién fue Vicente Lucero”, expresó Domínguez durante su discurso, en el que repasó el largo camino que llevó a la concreción del proyecto. El intendente destacó el impulso fundamental de Alberto Mariani y el compromiso de las nietas del escultor, quienes junto a la comunidad lograron rescatar del olvido a un artista cuya obra tallada en madera, yeso y cemento forma parte del patrimonio cultural de San Luis.

Lucero, nacido en 1914 en Justo Daract y fallecido en 1993, se formó en la Escuela de Artes y Oficios de Villa Mercedes y fue maestro de carpintería durante décadas. Sus esculturas, mayormente figurativas, fueron premiadas en diversos salones provinciales y nacionales, y en 1989 fue declarado “Tesoro Viviente de la Cultura” por el Gobierno de San Luis.

El nuevo centro no solo aloja una sala de exposiciones dedicada al escultor, sino que también integrará funciones administrativas como el Registro Civil, Juzgado de Paz, Rentas y oficinas municipales. “Es una inclusión del arte en la vida institucional y cotidiana de toda la comunidad”, señaló el jefe comunal.

Domínguez también recordó el origen del proyecto, surgido en 2017 durante una asamblea popular en la que una joven vecina, María Sol Laíno Orengo, soñó con un espacio para la cultura, el cine y la lectura. Ese anhelo inicial se enfrentó a múltiples obstáculos, desde obras inconclusas hasta el impacto de la pandemia y la paralización de fondos públicos. Sin embargo, el municipio logró reactivar la construcción y culminar la primera etapa.

“En todos estos objetivos hay que poner el corazón como guía y el amor por la tierra para poder lograrlos”, afirmó Domínguez. El proyecto contempla además aulas para música, pintura, danza, espacios para organizaciones comunitarias y un cine-teatro cuya restauración continúa en marcha.

El Centro Administrativo y Cultural “Vicente Lucero” ya es un símbolo de identidad y resistencia cultural en Justo Daract, donde la historia y el arte se entrelazan para proyectar futuro.