A pesar del paro, la atención en los sanatorios fue normal

A pesar de que los directores médicos de los cuatro sanatorios privados de la ciudad de San Luis habían anunciado su adhesión a la medida de fuerza nacional, que implicaba atender sólo las urgencias, la actividad ayer fue totalmente normal. En el Rivadavia, la Maternidad Cerhu, el Ramos Mejía y la Clínica Italia atendieron las cirugías programas, internaciones y turnos ambulatorios a todos los afiliados.

En el Rivadavia, la Maternidad Cerhu, el Ramos Mejía y la Clínica Italia atendieron las cirugías programas, internaciones y turnos ambulatorios.

“No podemos castigar a los pacientes porque el sanatorio vive de la gente. Esta adhesión es para que la ciudadanía sepa que las clínicas no tiran manteca al techo y que no podemos reinvertir, que es lo que precisamos”, explicó Guillermo Fiesta, director del Sanatorio Rivadavia.

En el mismo sentido se expresó Ricardo Páez, dueño de la Clínica Italia: “No sé si se expresó mal en el comunicado pero nosotros lo que hicimos fue adherir al paro convocado por la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina (Adecra) y la Confederación Argentina de Clínicas, Sanatorios y Hospitales (Confeclisa) que agrupa a los colegas de Buenos Aires. Aunque nosotros no somos miembros, igual quisimos adherir de manera simbólica. La actividad en San Luis fue normal porque no fue un paro médico, sino un llamado de atención”.

Respecto de los inconvenientes por los que atraviesa el sector privado de salud, el director médico del Rivadavia indicó que “este reclamo es para dar un aviso de que las clínicas están mal, no podemos sostener más la falta de insumos y de financiamiento. Somos castigados por la política del gobierno nacional, que ojalá pudieran parar la inflación”. Y en cuanto a la posible solución para este conflicto, dijo que “pasa por un cambio en las  políticas de Estado, de parar un poco la inflación, de resolver el  tema de las importaciones, de que podamos equilibrar nuestras cuentas con los ingresos. Con inflación no vamos a equilibrar nada. Además, hay que sumarle la paritaria donde nos están reclamando un 30% de recomposición salarial. Eso nos va a generar una erogación importantísima”.   

También el dueño de la Clínica Italia se expresó en ese sentido: “Nos vemos perjudicados por el aumento de los insumos y medicamentos, tanto nacionales como importados. Porque se han acortado los plazos de pago: antes nosotros podíamos pagar a 30 o 60 días, en cambio ahora las droguerías nos piden estar al día. Y encima tenemos que lidiar con las paritarias donde el gremio reclama un 30 por ciento de aumento para junio. Todo esto nos obliga a ajustar nuestros valores para poder mantener el personal, sobre todo, y la atención de los afiliados que tenemos”.

Según el análisis del doctor Fiesta, en el Rivadavia aproximadamente brindan un 45% de servicios a los afiliados de Dosep y un 55% para el resto de las obras sociales y prepagas. Estas últimas son la local Femesa y las nacionales Osde, Swiss Medical y Galeno, que representan entre el 25 y 30 por ciento de las prestaciones en ese establecimiento.

“Las prepagas son un ingreso importante para las clínicas y la recomposición de los valores para las mutuales se hace más difícil porque ellas nos otorgan aumentos únicamente cuando el gobierno nacional les autoriza aumentar la cuota mensual a sus afiliados. Hasta ahora el mismo porcentaje que les autorizan es el que nos dan a nosotros”, señaló Fiesta.

Mientras que Páez aclaró que “no dependemos directamente de las prepagas porque en San Luis ya recibimos el aumento de la obra social provincial y de las sindicales, por eso era simplemente una adhesión simbólica al paro, porque entre los cuatro sanatorios debemos estar en el orden del 10 o 15 por ciento de los pacientes con prepagas. Aunque la facturación por ellos es importante en la parte clínica”.