Tras el anuncio del intendente Enrique Ponce de construir una nueva planta de efluentes, integrantes del Concejo Deliberante tienen varias dudas sobre cómo se hizo la compra del terreno en el que se edificará la obra, un inmueble que según la Comuna implicó una erogación de casi 4 millones de pesos. Los ediles del Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS) buscan conocer, a través de un pedido de informe, si el Municipio efectivamente adquirió el inmueble, el valor pactado, la modalidad de contratación, qué extensión tiene el predio en el que funcionará, el nombre del vendedor y la inscripción dominial del bien. El texto, que encontró apoyo entre sus pares del bloque de Compromiso Federal, exige que "se deberá acompañar testimonio de la escritura pública o del contrato de compraventa celebrado, al igual que el plano de mensura que certifique su ubicación”.
La presentación de Claudia Rocha y Francisco Guiñazú establece que la solicitud, que mañana tomará estado legislativo en el Concejo Deliberante, deberá tener respuesta en un plazo de cinco días hábiles. Uno de los puntos que despierta dudas es el monto de inversión para la compra del terreno ubicado, según se comunicó, en el sector oeste de la ciudad. El edil comentó que los funcionarios municipales le habían informado que fue adquirido por un valor superior a los $3.700.000 mientras que en los medios se difundía que era de casi 4 millones. Además quieren saber por qué el inmueble no fue expropiado.


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