Fernando Gaviria se quedó con la tercera etapa del Tour de San Luis. Al igual que en Villa Mercedes, el colombiano dejó atrás a Mark Cavendish y Sacha Módolo. Fue el mismo podio de la jornada inaugural. Se repitió la historia. El "Cafetero" hizo un tiempo de 3h 48'44" para recorrer los 176,3 kilómetros de la etapa que unió Concarán con Juana Koslay. A pesar de la victoria del hombre de Colombia, la general sigue en poder del salteño Daniel Díaz (Funvic).
La etapa fue muy dura, con muchas rodadas. El calor, el viento y el sol jugaron un papel preponderante en la caravana multicolor, que apenas salida de Concarán encontró una fuga compuesta por cinco pedalistas Ismael Laguna (Argentina), Kiel Reijnen (Jamis), Giácomo Berlato (Nippo Vini Fantini), Guido Palma (Buenos Aires Provincia) y Lucas Lopardo (SEP). Los de adelante se animaron al desafío, y al darse cuenta que el pelotón no se movía, se fueron para adelante para tratar de estirar la ventaja, que llegó hasta casi los cinco minutos, fue ahí cuando se desprendió de la caravana el chileno Rodríguez, que quedó entre la fuga y el pelotón, hasta que le dio alcance y se sumó a los de punta.
La primera hora de carrera tuvo una media de 50 kilómetros. Un buen promedio, el viento, por momentos colaboró.
Los de atrás, de la mano del San Luis Somos Todos, comenzaron a moverse, pero fue un espejismo, porque nadie más intentó ir para adelante; y los de punta decidieron guardarse en el malón.
La idea de los escapados fue sumar puntos para las metas volantas. La primera meta sprint quedó en manos de Palma, fue a los 100 kilómetros, en Saladillo.
La segunda, en Potrero de los Funes fue para el chileno Rodríguez. Después de conseguir el cometido, el primero en guardarse fue Laguna, luego el pelotón neutralizó a los otros cinco valientes que estuvieron adelante casi toda la carrera.
Cuando agarraron rumbo a Juana Koslay, todos los equipos se pelearon por estar adelante. Comenzó el trabajo de fabricar el hueco para los sprinter. Italia y Nippo Vini Fantini comenzaron a tirar, pero ahí nomás se le sumó Bretagne-Seche Environn. Las tres escuadras ocuparon todo el ancho de la carpeta asfática para dejar sin lugar a los rivales. Fue una lucha sin cuartel. Nadie quería aflojar, pero no se trataba de meterle para adelante, sino de encontrar el espacio para ubicar la bici y embalar.
A cien metros de la meta, Colombia llevó a rueda a Fernando Gaviria. El Etixx -Quick Step hizo lo propio con Mar Cavendish y el Lampre Mérida lo subió a Sacha Módolo.
En los últimos cincuenta metros, Fernando Gaviria encontró el espacio justo. Acomodó la bici. Agachó el lomo y comenzó a sprintar. Lo salieron a buscar Cavendish y Módolo, pero no pudieron ante la potencia del colombiano que llegó en soledad y, una vez más, dejó con las ganas a dos pesos pesados.
Se repitió la historia de Villa Mercedes. Fue un Dejá vu. El pibe "Cafetero", que estará en el Mundial de pista, se preparó con todo para el Tour, ganó dos de tres etapas y es el gran protagonista.


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