Por más grave e irreversible que siga siendo el cuadro de Silvana Sindoni, la mujer que quedó en estado vegetativo por tomar pastillas para adelgazar, el suyo es un caso encuadrado en el delito de lesiones culposas. Por eso la investigación judicial contra el médico homeópata que le recetó los remedios, Fernando Gabriel Bori Pons, pasó del Juzgado Penal Nº 3 al Juzgado Correccional y Contravencional de San Luis.
El juez Correccional Marcelo Bustamante Marone le confirmó ayer a El Diario que recibió días atrás la causa iniciada por la jueza Penal Virginia Palacios. La incompetencia del Juzgado Penal por el tipo de delito que investigan fue declarada por el juez Sebastián Cadelago Filippi, titular del Juzgado Nº 1 que subroga en el Nº 2, porque Palacios está de licencia por un tratamiento de salud.
Sindoni sigue grave. Su historia clínica ya está en manos de la Justicia y el médico forense Ricardo Torres ha dictaminado que está en estado vegetativo.
“No está conectada con la realidad. Le funcionan todos sus aparatos y sistemas, menos el nervioso. A nivel de la corteza cerebral, está como un vegetal, no conoce, no razona”, afirmó el perito ante una consulta de este medio, en abril. “Hasta el momento es irreversible”, dijo entonces. Nada ha cambiado.
Ayer el abogado Carlos Salomón, representante del médico investigado, dijo que no hará otras presentaciones ante el juez Bustamante Marone por ahora. Pero el magistrado dijo que la primera medida que dispuso fue atender a un pedido que el abogado de Bori Pons había hecho ante la jueza Palacios y ordenar que le prestaran el expediente para que tenga acceso a la información que contiene.
El criterio por el cual la jueza que tenía antes el caso no le había concedido el sumario a Salomón sería que el médico al que representa el abogado todavía no está formalmente imputado en la causa.
Al caso lo siguen investigando bajo la carátula de “lesiones culposas”. La pena máxima que tiene ese delito es de 3 años de prisión y multa o inhabilitación por cuatro años como máximo (en este caso, si Bori Pons fuera, primero, imputado y luego hallado culpable, sería para ejercer la medicina). Y no iría a prisión.
De todos modos, pese a toda la labor que hizo Palacios, la investigación no ha llegado a hallar el nexo entre las pastillas recetadas por Bori Pons y el estado en que quedó la paciente.
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