Que las redes sociales son una gran caja de resonancia no es ninguna novedad. Pero todavía sigue habiendo un espacio para las sorpresas en medio de la marea de sitios que reflejan fotos, reflexiones y diálogos sin contacto personal. Algunas de esas sorpresas son muy agradables, como las que se está llevando por estos días Adolfo Rodríguez Saá gracias a la respuesta cálida y cariñosa de los puntanos a su convocatoria a que le escriban en Facebook, le cuenten sus alegrías y pesares, le dediquen un rato de su tiempo para que él tenga un panorama más amplio de lo que está pasando con la provincia y su gente, para poder dar así las mejores respuestas.
Y la sorpresa es mutua, porque también embarga los corazones de esa gente al comprobar que "El Adolfo", como todos lo llaman desde hace años, contesta cada inquietud, cada pedido, cada mensaje de aliento. Entonces se arma un ida y vuelta enriquecedor, retroalimentado a cada instante entre el dirigente y su pueblo. La gente escribe y él contesta, contiene, los sorprende con su dedicación. ¿Podrá responderles a todos? Es el gran desafío que se planteó para los próximos días. Sus allegados creen que sí, porque dedica muchas horas a esta corriente de afecto con los puntanos. Todos esperan el mensaje o el llamado y él está dispuesto a dejarlos contentos a todos. Sinergia que le dicen, y de la buena.
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